“El Hijo del hombre es un signo para esta generación”

Gál 4, 22-24. 26-27. 31-5, 1; Sal 112; Lc 11, 29-32.

¿Cuáles son los signos de estos tiempos?, ¿a qué nos impulsan estos signos?, ¿qué estamos dispuestos a hacer como respuesta a estos signos?

Los ninivitas escucharon a Jonás y se convirtieron. La Reina del sur, para escuchar a Salomón, recorrió una gran distancia. Conversión y camino largo, ambos requieren de una gran convicción, de esfuerzos y de sacrificios. Sin embargo, hoy nuestras “vidas acomodadas” nos ponen en riesgo de no exigirnos cambiar.

Algunos de los signos de la actualidad se ven representados por el vacío, el aburrimiento, la depresión, la tristeza y la desunión. Son signos que nos deberían impulsar a hacer cambios en nuestras vidas, pero nos condenamos a no hacer nada.

Jesús ha venido para que “tengamos vida, y vida en abundancia” (Cfr. Jn 10, 10), invitándonos a recorrer el camino del amor, aunque éste sea arduo. Cada vez que veamos la Cruz, signo de la entrega de Jesús, dispongámonos a la conversión.

Hoy y cada día… estemos atentos a los signos de cada día, que nos impulsan a vivir y amar en plenitud.

Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Pedro Alejandro Salazar Aranda