Amazonas es el mayor estado de Brasil. Situado en el norte del país, la mayor parte de su territorio está compuesto por la selva amazónica, lo que lo convierte en el segundo estado más escasamente poblado de Brasil. Pero las dificultades derivadas de la distancia y el desplazamiento  por el estado no han conseguido que la Sociedad de San Vicente de Paúl (SSVP) se desanimee. La SSVP está presente en el Amazonas desde hace 135 años, iniciándose en la capital, Manaus, y extendiéndose desde allí para llevar el carisma vicentino y la ayuda a los que más lo necesitan.

Misa conmemorativa de los 135 años de la SSVP en Manaus

La primera conferencia, llamada Nuestra Señora de la Concepción, se fundó en Manaus el 15 de agosto de 1887. Entonces se reunía en la iglesia del mismo nombre, en el centro de la ciudad, y hoy lo hace en el Santuario de Nuestra Señora de Fátima. «La Conferencia de Nuestra Señora de la Concepción se inició con motivo de la toma de posesión del consocio Comendador Clementino José Pereira Guimarães, posteriormente llamado Barón de Manaus. Su carta de agregación data del 7 de mayo de 1894. Desde inicios del siglo XX aportó su contribución, realizando una labor vicentina en favor de los necesitados de los barrios que rodean la iglesia matriz. Durante muchos años estuvo desactivada por falta de miembros, ya que los primeros fallecieron y no entraron miembros nuevos. Sin embargo, el 13 de julio de 1989, por iniciativa de los ya fallecidos Leôncio Barbosa de Souza, Ezio Veiga Botelho, Sebastião Valois y Sofia Soeiro do Nascimento, se celebraron nueve reuniones preparatorias, iniciando el proceso de reactivación. Y el 27 de septiembre de 1989 se celebró en el barrio Duque de Caxias la primera reunión para reactivar la Conferencia», comenta Sonia Nunes, actual presidenta del Consejo Central.

Reunión del Consejo Central Manaus

Números

El Consejo Central de Manaus está vinculado al Metropolitano de Belém (estado de Pará) y agrega cuatro Consejos Particulares: Rio Branco Acre, en el Estado de Acre (a 1.396 kms de distancia de Manaus); Santa Rita de Cássia, en la capital de Manaus; San Antonio de Padua en el municipio de Borba (a 322 kms por río); Nuestra Señora de los Dolores, en el municipio de Manicoré (a 616 kms de distancia por río). Además de Acre, el Consejo Central abarca las conferencias de Roraima: «Tenemos un equipo articulado. Tenemos cinco conferencias, pero por el momento sólo tres operan en el municipio de Nova Olinda do Norte, distante de Manaus 236 kms en barco. Tenemos una Conferencia instalada en la ciudad de Boa Vista, resultado de la visita del Departamento Misionero del Consejo Nacional de Brasil. Somos un pequeño grupo de 76 consocias, 37 consocios y 14 aspirantes, divididos en 19 Conferencias al servicio de nuestros Maestros y Señores, los necesitados», dice la presidenta.

Acción de Navidad con las familias asistidas

El Estado de Amazonas cuenta con una Obra Unida, llamada Casa de Ancianos «San Vicente de Paúl», que actualmente acoge a 21 personas mayores, de 60 años o más, y tiene una larga lista de espera. «Celebramos los 135 años con muchas dificultades, tanto materiales como humanas. La mayoría de los vicentinos activos tienen más de 40 años. Pero eso no nos impide trabajar. En Manaus, en 1989, creamos la primera escuela vicentina, ahora coordinada por la consocia Carla Andrea, que reunió a hijos y sobrinos de vecinos para conseguir la fundación. El Consejo Central de Manaus, una vez al año, celebra la ENVIA (Encuentro de Vicentinos del Amazonas), hoy llamado ‘de la Amazonía’, por ya tener participantes del estado de Acre y Roraima «, explica.

La pandemia del Covid-19 perturbó el trabajo del Consejo Central, así como el de tantas otras unidades vicentinas repartidas por todo Brasil. Pero incluso con las restricciones sanitarias, los consocios y consocias de Amazonas, Acre y Roraima no han dejado de trabajar. «Con motivo del momento álgido de la pandemia, en diciembre de 2020 y enero de 2021, se creó el ‘Proyecto Médicos de la Caridad’, una iniciativa de la Conferencia de Santa Cecilia, vinculada al Consejo Particular de Santa Rita de Cássia en Manaus, que con consocios y consocias de otras Conferencias distribuyó bocadillos en las puertas de los hospitales a los acompañantes de los pacientes hospitalizados para aliviar el hambre durante la espera. Visitábamos tres o cuatro hospitales a la semana y, con el tiempo, todas nuestras Conferencias empezaron a participar, dentro de sus posibilidades, con la donación de bocadillos», recuerda.

Desafíos 

La mayor dificultad para los vicentinos de esa región es la distancia entre las ciudades y las Conferencias. Por lo general, se necesitan horas de viaje en barco y mucho esfuerzo para ir de un lugar a otro.

Otra cuestión que se plantea como un reto a superar es la condición socioeconómica de la región, que no tiene un gran poder adquisitivo. «Muchas veces tenemos que pagar nuestros gastos con nuestros recursos personales para ir a alguna formación o reunión regional. Pero no dejamos de participar. En los últimos tiempos nos ha complacido mucho el compromiso del Consejo Nacional de Brasil, que nos ha considerado con gran atención y cariño. Así que esto también nos da condiciones y ánimos para trabajar», dice.

La fuerza de voluntad de los vicentinos del Consejo Central de Amazonas es un elemento que hay que destacar. «Tenemos un vicentino en el municipio de Borba que, para atender y visitar a un asistido en la zona rural, viaja solo en una canoa. Tarda dos horas en remar río abajo y cuatro horas río arriba. Gracias a Dios, todavía tenemos gente comprometida con la ayuda a los pobres».

Los vicentinos viajan en barco durante horas para llegar a los asistidos

Obra Unida

En funcionamiento en Manaus desde hace 42 años, la Obra Unida Casa de Ancianos «San Vicente de Paúl» atiende actualmente a 21 personas mayores. Hoy en día es una referencia en el tratamiento de los ancianos en el estado, y la Casa es motivo de orgullo para el Consejo Metropolitano y la SSVP. «Tenemos un grupo de profesionales que trabajan en la Casa con nuestros mayores y se les sigue convocando para dar charlas en colegios y otras entidades cuando el tema es la tercera edad. Tenemos un equipo que se ocupa de la casa, como la cocinera, el personal administrativo y el equipo técnico multifuncional, que incluye médicos, enfermeras, auxiliares, psicólogos, nutricionistas y trabajadores sociales, entre otros. Todo se hace con mucho amor, profesionalidad y cuidado», dice el presidente de la Obra, el consocio João Romão Rodrigues Neto, que comenzó en la Casa como voluntario, bañando a los ancianos, ayudando a alimentarlos y haciendo cualquier servicio que fuera necesario.

Recuerda que, cuando empezó como voluntario, las leyes que regían los Hogares de Ancianos eran diferentes. Su amor por el Hogar de Ancianos es tan grande que João dejó la presidencia del Consejo Central para dirigir el hogar en 2018. Fue reelegido y, debido a la pandemia, se le prorrogó el contrato, y pronto entregará el cargo. «Estoy muy contento aquí. Doy mi alma por la SSVP, que es mi mayor satisfacción. Estoy en la Obra los días y doy clases por la noche. El año que viene entregaré mi puesto y ya bromeo con que lo echo de menos. Recientemente nuestra Casa ha sido renovada y siempre intentamos mejorar para servir a nuestros mayores. Sé que marcamos la diferencia no sólo para ellos y sus familias, sino para la sociedad de Manaos, porque nos esforzamos por compartir nuestros conocimientos en conferencias y eventos», explica el presidente.

Fuente: https://ssvpbrasil.org.br/