“Sembraré la simiente preciosa del glorioso Evangelio de amor.  Sembraré, sembraré mientras viva.  Dejaré el resultado al Señor”. (Himno Antiguo)

Después de un tiempo de discernimiento y estudio Los Padres Paules y las Hijas de la Caridad han decidido establecer una nueva misión colaborativa en Carolina del Sur en los Estados Unidos.  Ha existido por años la necesidad de ayudar a los Migrantes Trabajadores en la parte espiritual y corporal de este sector.  Es el clamor de San Vicente: “La gente de los campos muere sin evangelización”.

El estudio reveló la urgente necesidad de los migrantes en sus “puntos de destino”.  Cuando cruzan las fronteras hay muchas ayudas de distintas organizaciones cívicas y religiosas, pero al llegar a sus destinos carecen de recursos necesarios.  En las fronteras solo están de paso, pero en los “puntos de destino” es donde se alojan por periodos más largos de tiempo.   Algunos dejan de ir a la corte y optan por vivir tras bastidores sin derechos.  El pequeño condado de Saluda tiene una población de migrantes establecidos, otros que acaban de llegar y los migrantes trabajadores que están con un visado de trabajo. Es un sector rural y muy pobre.

Esta pequeña misión contará con tres Hijas de la Caridad:  Sor Paula Gallant, Sor Consuelo Tovar y esta servidora, Sor Migdalia Flores además de un Padre Paúl el Padre Orlando Cardona.  Ya estamos deseosos de llegar y comenzar esta obra de Dios.  Esperamos contar con las oraciones de todos mientras nos embarcamos en esta nueva travesía que por supuesto tendrá sus retos.  ¡Que podamos presenciar muchos frutos de la tierra y a la vez frutos para la construcción del Reino de Dios!