La mayoría de las veces los periodistas metemos las narices donde no nos llaman y escribimos de lugares y de gentes que no tienen relación directa con nosotros; pero somos así y lo hemos hecho a través de los años. En este caso en particular si me preocupa porque he estado ligado a Colombia y sobre todo a los colombianos por muchos años, estoy casado con colombiana y alguno de mis hijos nacieron en Colombia, conozco el país casi completo y garantizo de la decencia y las grandes cualidades de esa gente que por muchas razones, política, narcotráfico han sido tildadas con epítetos desalentadores. Es un país de gente trabajadora, amable y muy rumbeadora y que saben aquilatar la amistad. Desafortunadamente como muchos países del orbe políticamente ha sido un desastre y todo porque ha estado llena de corrupción y mucha gente haciéndose millonarios a costilla del pueblo.

Esos que se creen verracos políticos, nunca pensaron que un día el pueblo diría BASTA y desea pasarle la cuenta a esos que por años han dominado las elecciones pasándose el poder de un lado al otro. Este estallido social se produce con un marco de  una pandemia llevando a miles  de personas a la muerte, sin embargo se crearon una serie de manifestaciones multifactoriales desencadenadas por el anuncio del proyecto de reforma tributaria propuesto por el gobierno de Iván Duque, realizadas inicialmente con el objetivo de lograr la eliminación de esta propuesta reestructuran te y las cuales fueron acentuadas principalmente por el uso desproporcionado de la fuerza por parte de las autoridades y la retoma de la solicitud de acción para la solución de otras problemáticas sociales que se había iniciado 18 meses antes con paros que ya ustedes conocen. Como es posible que un pueblo con un alto concepto de la camaradería y la hermandad se enrede en una lucha fratricida que solo conduce a la muerte y a el odio entre hermanos. Esto yo creo que debemos pararlo ya. Señores policías esos muchachos pueden ser sus hijos, sus sobrinos dejemos que hagan sus propuestas en calma, aunque sean jóvenes tenemos el deber de escucharlos y respetarlos porque esa es la generación del mañana, ustedes están ahí para cuidarlos y no para golpearlos y asesinarlos. Y a ustedes jóvenes, respeten a esos funcionarios de la ley que están ahí para cuidarlos y evitar que alguno cometa un error y evitar que fuerzas foráneas se aprovechen de la confusión para sacar sus manos tenebrosas de odio a todas las instituciones públicas. Hagan uso del respeto para entonces exigir respeto.

Algunos hermanos me hicieron llegar estas propuestas que exigen los manifestantes:

• Renuncia de Iván Duque junto a su equipo de gobierno de la presidencia.
• Retiro de la reforma tributaria.
• Retiro de la reforma a la salud.
• Renuncia del Ministro de Hacienda Alberto Carrasquilla.
• Renuncia de General del Ejército Nacional Eduardo Enrique Zapateiro Altamiranda.
• Renuncia del ministro de defensa Diego Molano Aponte.
• Juzgamiento al ex presidente Álvaro Uribe Vélezpor crímenes de lesa humanidad.
• Cumplimiento de los acuerdos realizados gracias a las protestas de 2019-2020
• Cumplimiento de los Acuerdos de paz con las FARC-EP
• Reforma del Congreso de la República de Colombia
• Reforma de la Policía Nacionaly desmonte del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD)

Tengo entendido que algunas de estas propuestas han sido logradas como el Anuncio de Matrícula cero para estratos 1, 2 y 3 para el semestre 2021-2. La renuncia del Ministro de Hacienda, el retiro de la reforma tributaria 2021, renuncia del canciller, retiro de la reforma de salud 2021, también renuncio el alto comisionado para la paz. No creo que esto solucione todas las expectativas y que el gobierno deba sentarse en una mesa donde estén los jóvenes, profesores y gente del pueblo con las debidas garantías a discutir estas y muchas más propuestas, por ejemplo, no vi en esta lista, la creación de trabajos para rebajar la alta cantidad de desempleados, la erradicación de la pobreza y lo más importante una campaña, sin precedentes para evitar la corrupción. No estoy enviando más leña al fuego, lo que pasa es que el amor que le tengo a Colombia me hace soñar.

Hermanos yo sé que es desleal de parte mía que les pida paciencia, quiero llegarles al corazón de tantos hermanos de buena fe y de personas con  grandes conocimientos que existen en Colombia que no vean esto como algo que a mí no me importa, si debe importarles a todos, para evitar males mayores, usen la iglesia como garante, no más gente muerta ni herida porque son colombianos, no son gente de afuera que se están frotando las manos, para intervenir y sacar leña de palo caído.

Pidamos a Dios que ponga su mano sobre un pueblo creyente y sobretodo digno de sus grandes valores. Dios salve a Colombia

Por Víctor Martell

Protestas en Cali contra la reforma tributaria de Duque y Carrasquilla