“Las personas sin hogar son a la vez vulnerables y fuertes, victimizadas y capaces, criminalizadas e inocentes, vistas y voluntariamente ignoradas”.
Este comentario me llego al alma y no digo al corazón porque fue más profundo, en los Estados Unidos cuando se habla de personas sin techo les llaman: “Ese es un homeless”, ahora tendrán que llamarlos “homeless families”, porque ya no son personas solas a los cuales les ponían el epíteto de drogadictos o que les gustaba esa vida porque no tenían que trabajar y pidiendo en la calle en una hora conseguían 20 dólares para cubrir sus necesidades de alcohol y drogas y yo les pregunto: ¿Qué dirán ahora?, las familias se enloquecieron y se fueron a la calle con hijos abandonando sus comodidades. Por favor, no sean ilusos. ¿A quién quieren engañar?
Habremos algunos que nos preocupamos por esto porque sabemos que el futuro será de cientos de familias en esas condiciones porque no pudieron pagar sus arriendos y gritamos a los cuatro vientos haber si alguien nos escucha, otros aceptan que los que no tienen casa no es su problema, bastante tienen ellos con buscar con que pagar sus cuentas, es verdad, nadie pide que los recojas y los lleves a tu casa, lo que tienes que hacer, es denunciar esto ante los políticos los cuales tu llevaste a esos puestos y que hagan algo por estos pobres sin hogar.
Hablamos de miles de dólares que destina el gobierno para ayudas, porque no usa una parte de esos billonarios presupuestos en hacerle casas a estos que no la tienen, por qué tanta demagogia de ayudas que no se ven. Señores senadores, representantes: Ustedes tienen la obligación de ver por los que necesitan y si ustedes lo hacen no tendrán que hacer campañas políticas, nunca más porque la población cuando vea que ustedes se ocupan de los necesitados votaran a su favor, nuevamente. Ustedes no pueden legislar nada si no escuchan a estas personas, por favor bajen de sus asientos y hablen con ellos sepan de sus problemas y después pueden sentarse a legislar, no crean lo que dicen los periódicos o los hermanos que creen que con llevarles una comidita a los portales del centro de Miami van a resolver el problema, yo lo he hecho y sé que con ello quizás coman ese día; Pero ¿Que comerán al día siguiente?
Esto debe ser una participación de los cristianos y los no cristianos porque si nos unimos y no pensamos en nuestro bienestar solamente, estamos haciendo algo, exijamos el derecho de los que no tienen casa porque ellos no pueden hacerlo y a los que no creen el sufrimiento de esa gente los invito a que escojan un portal en Miami y pasen una noche a la intemperie, si llegan vivos al otro día sabrán lo que se padece en esa situación y entonces quizás entonces, seas capaz de rasgarte tus vestiduras a favor de los sin techo.
Víctor Martell
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