“Vengan a mí los que están fatigados y agobiados”
Is 26, 7-9.12.16-19; Sal 101; Mt 11, 28-30.
En los momentos de dificultad podemos tomar dos actitudes: desesperarnos y sentirnos “víctimas”, o bien, ir a la oración y pedirle a Jesús: muéstrame el camino que quieres para mí, ayúdame a verlo con claridad desde tus ojos.
Hoy celebramos a la Virgen del Carmen; recurrimos a ella en todo momento porque es nuestra madre. Les comparto esta bella oración:
Tengo mil dificultades: ayúdame. De los enemigos del alma: sálvame. En mis desaciertos: ilumíname.
En mis dudas y penas: confórtame. En mis enfermedades: fortaléceme. Cuando me desprecien: anímame.
En las tentaciones: defiéndeme. En horas difíciles: consuélame. Con tu corazón maternal: ámame. Con tu inmenso poder: protégeme.
Y en tus brazos al expirar: recíbeme. Virgen del Carmen, ruega por nosotros. Amén.
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Carmen Elisa Arteaga Solís
0 comentarios