La Catequesis Especial Vicentina (CEV) inicia como un pequeño grupo, en 2004, en la Parroquia Vicentina de San Pio X de Reynosa, Tamaulipas, como respuesta a la necesidad de incluir a los sacramentos a personas con diferentes tipos de discapacidad y a sus familias. Poco a poco fue creciendo la demanda de esta catequesis especializada ya que ofrecía un lugar en donde a estas personas se les trata como únicos, se les apoya, se les cuida, se les capacita para que puedan integrarse a la sociedad, y sobre todo, se les habla del grande e infinito amor que Dios siente por ellos. De allí se ha extendido a otros lugares de la República Mexicana, con nuevos grupos de catequistas y evangelizadores que atienden esta pastoral, previa capacitación mediante cursos de inducción, seminarios y talleres, manejo de manuales y material visual didáctico, que hemos realizado y en los cuales se exponen la pedagogía y metodología propias.
CEV está dirigida a personas con alguna discapacidad intelectual, física, auditiva, visual o psicosocial y a todos aquellos que requieran una atención especial (los llamamos con cariño “amigos especiales”). Por supuesto están incluidas sus propias familias, quienes son parte importante del proceso.
OBJETIVO: Compartir y dar a conocer a los“amigos especiales” –y a sus familias– el amor que Dios nos ha mostrado a través de Jesucristo, para que sean también ellos buenos discípulos/misioneros. Les apoyamos con material y psicológicamente, según sus necesidades específicas.
CEV pretende influir en la sociedad a favor de ellos, pues: “Es más fácil aceptar en la familia un hijo con discapacidad si la sociedad también lo acepta”.
MISIÓN: Apoyar a los “amigos especiales” y sus familias a mejorar su calidad de vida, a que sean aceptados, apoyados e integrados a su comunidad.
VISIÓN GENERAL: Lograr que cada comunidad, donde se encuentre CEV, sea un centro de evangelización integral para los amigos especiales y sus familias. Al mismo tiempo, las familias evangelizadas, en un futuro, sean el apoyo y motivación para otras que se encuentren en la misma situación, participando activamente en todos los procesos de CEV: Evangelización y servicio.
CEV desea, por medio de la atención personalizada y con sencillas técnicas especializadas, darles a conocer el amor de Dios. Lo hacemos con la ayuda del Espíritu Santo, asesores religiosos y laicos especializados (neurólogos, psicólogos, terapeutas conductuales, terapeutas familiares, psicopedagogos, educadores, etc.) y nos preparamos con un Diplomado en Catequesis Especial Vicentina que ofrecen CEV y la Universidad Pontificia de México.
Formamos una Asociación Civil, ya que desea- mos apoyar, en la medida de nuestras posibilida- des, a estas personas, para hacer realidad una Evangelización integral.
¿POR QUÉ CATEQUESIS ESPECIAL VICENTINA?
- Catequesis: Porque buscamos compartir nuestra fe en Jesucristo y tratamos de hacerlo por medio de nuestras vivencias y con un método sencillo, personal y especializado dirigido a las personas con discapacidad y a sus familias. En sesiones semanales, durante los ciclos escolares regulares de catequesis.
- Especial: Porque nuestro servicio es para los “amigos especiales” y sus familias, “Sectores humanos de especial sensibilidad que necesitan urgentemente otra manera de dar catequesis, con una pedagogía propia”. (Ap 232; CT 41).
- Vicentina: se refiere a nuestra espiritualidad y modo de mirar y servir a los necesitados, tal como lo hicieron San Vicente de Paúl y Santa Luisa de Marillac (patronos universales de las obras sociales y de caridad): “mirar y servir a los pobres en Jesucristo”.
Toda la riqueza de tantas personas que han colaborado estos 15 años de CEV se ha visto plasmada en manuales, talleres y distintos materiales y dinámicas propias. Los resultados que hemos tenido en los grupos han sido muy buenos, según los testimonios recibidos.
Creemos que al aceptar a los “amigos especiales”, ofreciéndoles un espacio en nuestra Iglesia, estamos demostrando el Amor de Dios por los más pequeños (“Quien recibe a uno de estos pequeños a mí me recibe” Mt. 25, 40).
Formamos grupos de apoyo con las mismas familias y las “empoderamos” para que sean evangelizadoras de otras familias en circunstancias parecidas, ya que nadie puede tener la sensibilidad ni conocer mejor sus carencias que ellas mismas. Estamos convencidos que son los “amigos especiales y sus familias” quienes nos evangelizan. Y como la catequesis solo es posible en un clima sobrenatural y particularmente en un clima de oración, nadie se acerca a un “amigo especial” sin haber orado primero. Antes de cada sesión semanal, los catequistas y evangelizadores tenemos una hora santa con la Liturgia de las Horas y Lectio Divina con el evangelio.
Deseamos ayudar a los “amigos especiales” a integrarse plenamente a su comunidad y a la sociedad con una catequesis inclusiva, en un proceso hacia la construcción del reino predicado por Nuestro Señor Jesucristo, en una “Iglesia de puertas abiertas”, como pide el Papa Francisco.
Dra. Leticia Ascencio de Lomeli,
Asesora Nacional de CEV.
Hola, buenas noches, yo soy Vicentina, estuve trabajando en la casa Hogar San Vicente de Paul en Reynosa, y allá conocí esta familia de Catequesis Especial Vicentina, pero ahora vivo en Saltillo y me gustaría saber si aquí en Saltillo existe grupo de CEV, pues tengo un sobrinito-nieto especial y su mamá desea que el niño haga su primera comunión.
Les agradezco su atención, saludos hermanas Vicentinas.