Al final del año 2017, miembros de la SSVP Yvelines (78) viajaron a Vietnam a fin de encontrarse con sus homólogos vicentinos.

La Sociedad de San Vicente de Paúl está presente en Viêt Nam desde 1930, pero las actividades de las Conferencias fueron brutalmente interrumpidas en 1975 con la anexión de Viêt Nam del Sur por el Norte. A partir de 1976, los vicentinos ejercen en la clandestinidad. Aunque las actividades de la Sociedad sean conocidas por las autoridades, la SSVP de Viêt Nam está albergada en la catedral de Đà Nẵng y no tiene personalidad jurídica oficial.

(Re) tomando contacto

Desde hace bastantes años, la SSVP de Francia intervenía en Viêt Nam apoyando financieramente las obras de la Congregación de las Hijas de la Caridad, bien implantada y que goza de un reconocimiento oficial que permitía el envío de sumas de dinero. Sin embargo, hubo pocos contactos entre el Consejo General de París y la SSVP de Viêt Nam, en parte a causa de la barrera lingüística y de la situación particular de ésta última.

El contacto con la SSVP de Viêt Nam se ha reanudado en 2015, con ocasión de la Asamblea General de Roma, en la que participó un miembro de la Sociedad Vietnamita. Después, en 2016, el equipo actual del Consejo Superior vietnamita ha tomado contacto oficialmente con el Consejo General, presentando una lista de 27 Conferencias.

Actividades de la SSVP

La SSVP de Viêt Nam, que vive exclusivamente de dones locales, tiene muy  pocos medios financieros pero puede contar con equipos de voluntarios muy entregados. Así, en Đà Nẵng, las Conferencias de San Vicente de Paúl cuentan con 135 miembros. Fundamentalmente, sus actividades se concentran en ayudar a las familias necesitadas. Cada primer domingo de mes, la Conferencia de la catedral de Đà Nẵng distribuye entre 600 y 700 kg de arroz a setenta familias de entre las más pobres de la ciudad. La Conferencia da también algunas ayudas en metálico, especialmente para las familias más alejadas, o para cubrir gastos médicos.

La región de Huế cuenta con una decena de Conferencias para 140 vicentinos. Cada semana, recibe dones de sus miembros, en general paquetes de arroz. También se beneficia en cada Conferencia de una colecta parroquial anual.

La segunda actividad importante de las Conferencias de Huế es la acogida de niños abandonados, cuyas madres son la mayoría de las veces jóvenes solteras. Esta actividad se combina con la de las religiosas que alojan a las jóvenes madres el tiempo necesario para que puedan dar a luz discretamente, a espaldas de su entorno.

Posibles proyectos:

La visita realizada en diciembre de 2017 por los miembros de la SSVP –Yvelines pudo sacar a la luz las necesidades urgentes, que exigen la creación de proyectos humanitarios:

  • Construcción de una sala polivalente en Lương Văn (región de Huê): en este pueblo que sufre frecuentes inundaciones (2 o 3 veces al año), un lugar con seguridad sería muy útil para alojar a los damnificados en caso de catástrofes ligadas a la meteorología, pero también para servir de guardería y permitir que los padres, todos muy pobres, puedan trabajar los dos. Durante la última inundación, en noviembre de 2017, 2 barrios quedaron especialmente afectados, alcanzando el agua un metro de altura en el interior de las viviendas.
  • Ayuda alimentaria y médica para niños con una minusvalía severa de Tam Thanh: el párroco local ha identificado en un radio de cinco kilómetros unos sesenta niños con serias minusvalías mentales y físicas, con malformaciones muy graves, o que están gravemente enfermos. Estos niños, procedentes de familias muy pobres, no gozan de ninguna cobertura médica. El objetivo es multiplicar los encuentros con las familias para permitir a la vez un acompañamiento humano y espiritual regular al conjunto de las familias, así como una atención médica y paramédica (kinesiterapia) que pueda aliviar los sufrimientos de los niños y de sus familias.
  • Acceso al agua potable para el pueblo de Tam Thanh: según los habitantes, las minusvalías que sufren los niños se deberían a la contaminación del agua, causada por productos químicos (entre los que está el terrible “agente naranja”) que se vertieron durante la guerra (1963-1975). El acceso a un agua no contaminada es, por tanto, del orden de la urgencia humanitaria, y el proyecto se compondría de 2 partes: perforación de un pozo con una profundidad de unos cien metros e instalación de un sistema de filtración del agua extraída. Según los vicentinos que visitaron el lugar, hace falta una investigación más exhaustiva a fin de determinar con precisión el origen de esta contaminación, antes de plantearse una inversión importante.

Para respaldar estos proyectos, la SSVP de Viet Nam va a presentar también solicitudes de hermanamientos, con el fin de recibir el apoyo espiritual y material de las Conferencias francesas, por ejemplo para para atender y alojar a personas mayores sin recursos en el delta del río Mékong.

A pesar de los obstáculos, la ayuda a los más desfavorecidos en Viêt Nam no ceja, especialmente gracias a la implicación de voluntarios vietnamitas y a las ayudas financieras francesas. ¡Nada detiene a los vicentinos!

Fuente: http://ssvpglobal.org/

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