Miq 2, 1-5; Sal 9, 22-35; Mt 12, 14-21.
“Planearon el modo de acabar con Jesús”
Felicita a todas las Cármenes que conozcas. Celebramos hoy la fiesta de Nuestra Señora del Carmen. Y, con Teresa de Ávila, Juan de la Cruz, Teresita el Niño Jesús o Edith Stein o tantas y tantos carmelitas podemos invocar a María que nos enseña a dar nuestro consentimiento y a “conservar y darle vueltas en nuestro corazón” al Señor y a su Palabra.
“Pobres de ustedes que, por la noche, traman la injusticia y al amanecer la ejecutan, si está a su alcance”, –nos dice la primera lectura del día. Y ese era el programa de los fariseos: “planearon el modo de acabar con Jesús”. Hoy no son los antiguos fariseos, son otros que, desde dentro, lo disuelven o lo cocinan a la carta en su microondas exegético para contentar los oídos de las casi-ilustradas burguesías. O son determinados movimientos en contra de la naturaleza y de la vida, que gastan millones en los medios o en manipuladas ONGs a su servicio. Quieren imponer e implantar una nueva conciencia donde Jesús no tenga lugar. Pero “Jesús se marchó de allí y siguió curando a los enfermos…”. Y así sigue, curando a muchas de las víctimas de estos movimientos, que al abrirse a la luz se convierten en intrépidos testigos. Así acaba de pasar con Sara Winter, co-fundadora de Femen en Brasil. Hoy pide perdón y confiesa: “una de las cosas que me arrepiento en mi vida es haberme alejado de Dios y dedicado todo mi tiempo a la militancia feminista”.
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Honorio López Alfonso, C.M.
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