Amigos y amigas de FAMVIN:

¡Saludos!

Les agradezco las noticias que nos llegan a través de ustedes, sobre el transitar de toda la Familia Vicenciana en el mundo.

Es una gran alegría pertenecer a esta gran y maravillosa familia, que se ocupa del servicio y la evangelización de los pobres, honrando así el legado que nos dejó nuestro amado San Vicente de Paúl y Santa Luisa de Marillac, para crecer cada vez más en el amor a Dios mediante la construcción de un mundo sin opresores ni oprimidos, un mundo de hermanos.

Gracias también por la profunda carta del P. Gregory Gay, CM para este Adviento 2015. Ojalá podamos vivir este momento tan importante de la preparación de la venida de nuestro Salvador Jesucristo y con Él luchar por que todos tengan vida, y vida en abundancia.

En Brasil, como en todo el mundo, estamos llevando a cabo la novena en honor de Nuestra Señora de Gracia, Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa. Hay muchas iniciativas que acompañamos por todas partes, donde la devoción a la Madre querida se percibe con intensidad. La creatividad de los grupos de AMM, junto con otras ramas de FAMVIN, nos emociona y nos hacen creer que «Unidos en Cristo, nosotros vicentinos hacemos la diferencia».

Volví hace unos días de Curitiba, capital del estado de Paraná, donde asistí a la reunión de la Asociación de la Medalla Milagrosa, con representantes de los diversos grupos de la AMM, viviendo con entusiasmo y alegría nuestra pertenencia a la Familia Vicenciana.

Que nuestra Madre del cielo nos enseñe día a día a hacer todo lo que nos dijo Jesús.

Buena fiesta para todos

Agradecidamente,

Orlanda Rodrigues Alves
Presidenta Nacional de AMM Brasil.