“El Buen Pastor da la vida por sus ovejas”
Is 61,1-3; Sal 22; Jn 10. 11-16.
En este Evangelio Jesús nos muestra que es El, el buen pastor por excelencia. Hace la distinción del pastor mercenario que no le interesa el rebaño y busca mas bien aprovecharse de él. EN cambio, Jesús el Buen Pastor, escucha sus ovejas, busca a las descarriadas, las cuida, las alimenta y da la vida por ellas. Ese es Jesús nuestro Buen Pastor con todas estas cualidades. Un pastor que nos ama y quiere lo mejor para nosotros.
Monseñor San Rafael Guízar un ejemplo de Buen Pastor: Trabajador incansable: Una de sus frases preferidas era: “Ya tendré tiempo para descansar en el cielo”. Con un carácter alegre abierto, optimista. Poseía una vida profunda de oración y fe. Él iniciaba su día con una hora de oración, aunque se puede decir que su vida entera fue una oración. Un profundo amor a la Santísima Virgen. Llevó una vida de pobreza, desprendimiento y de humildad. Sus bienes heredados fueron para fundar obras pías. Vivió la pobreza a fondo. Tanto así que le llegaron a decir “el San Francisco mexicano. ”Renuncia a vivir en la casa episcopal. Vende su anillo y su cruz episcopal para remediar necesidades de los pobres.
¿Qué me enseña este buen Pastor Obispo?
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Jaime Reyes Mendoza C.M.
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