“Si los encuentra en vela, dichosos ellos”
Ef 2, 12-22; Sal 84; Lc 12, 35-38.
Un turista americano visitó al famoso rabino polaco Hofetz Chaim. Y se quedó asombrado al ver que la casa del rabino consistía, sencillamente, en una habitación atestada de libros. El único mobiliario lo constituían una mesa y una banquita.
- Rabino, ¿dónde están tus muebles? –preguntó el turista–.
- ¿Y dónde están los tuyos? –replicó Hofetz–.
- ¿Los míos? Pero si yo sólo soy un .. y estoy aquí de paso… –dijo el americano–.
- Lo mismo que yo –le dijo el rabino–“.
¿Qué te hace pensar esta historia? Todos estamos de paso y el estar atentos, vigilantes, preparados es la mejor manera de pasar por esta vida.
La vigilancia activa es la actitud propia del cristiano, conscientes de que estamos de paso por esta vida… La mejor forma para prepararnos para el encuentro con Dios es la fidelidad. “Al que mucho se le dio, mucho se le exigirá.” Por eso, Dame la gracia de serte fiel siempre. Podría preguntarme:
¿Cómo está mi fidelidad a Ti? ¿Soy fiel a los compromisos que he adquirido con los demás?
¿Qué es la fidelidad para mí?, y para Ti, Señor, ¿qué significa ser fiel?
Ayúdame a responderte como mereces ya que como dice la frase popular: amor con amor se paga.
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Jaime Reyes Mendoza C.M.
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