¿Cuál es la misión específica y cuál es el origen de la Fundacion Vicentina Luisa de Marillac? ¿Puede hablarnos sobre la especificidad de su carisma y su vinculo con los pobres? ¿Cuál es su enfoque para servir a los pobres

La Asociación Luisas de Marillac, hoy Fundación Vicentina Luisa de Marillac, se inicia en París en 1909. El 29 de noviembre en la Parroquia de San Nicolás de Chardonnet, el padre Villete, C.M., subdirector general de la Damas de la Caridad, dio lectura a la patente de afiliación aprobada por el arzobispo de Paris, monseñor Amette, por la cual la nueva asociación titulada “Obra de la Venerable Luisa de Marillac” quedaba adherida a las Damas de la Caridad. A raíz de este hecho fundacional se extiende por diversos países.

La formación moral y cristiana de sus integrantes y a la luz del Evangelio, servir a los pobres, en especial los ancianos, mediante un programa de Promoción, Prevención y Rehabilitación Integral, es la BASE FUNDAMENTAL de la fundación, bajo la doctrina de san Vicente de Paúl y santa Luisa de Marillac.

El 23 de noviembre del año 2009, en la ciudad de Cali, Colombia, (Fecha en la que se cumplían los 100 años de creación en Paris), se llevó a cabo la Primera Reunión Internacional en la que participaron los grupos de Ecuador, Guatemala y Colombia, con el fin de unificar criterios y acciones que favorezca el quehacer de la Fundación de acuerdo a la filosofía de la Familia Vicentina. En ella se aprobaron los Estatutos Internacionales vigentes actualmente.

Por ahora no tenemos santos, beatos o siervos, Dios permita que esto pueda ser más adelante. Sí está en proceso la beatificación de sor Cecilia Charrín, Hija de la Caridad de origen francés, quien fundó en Guatemala la Asociación Luisas de Marillac, el 15 de marzo de 1937.

Seguidamente la oración de la Fundación a la que encomendamos siempre nuestras acciones:

ORACIÓN DE LA FUNDACIÓN VICENTINA LUISA DE MARILLAC

Oh, Padre bueno y misericordioso, que inspiraste a san Vicente de Paúl y santa Luisa de Marillac el camino a la santidad a través de la caridad en el servicio a los pobres: te pedimos que infundas en cada uno de los miembros de la Fundación Vicentina Luisa de Marillac la docilidad a las inspiraciones del Espíritu Santo y las  virtudes de la humildad, la sencillez y la caridad; que sirvamos a los pobres como imágenes vivas de tu Hijo, muerto y resucitado; que cultivemos un ambiente de unidad entre nosotros y de pertenencia a la Iglesia, a la Familia Vicentina y a la humanidad; y que vivamos una santidad a la luz del Maestro.

Te lo suplicamos por el mismo Señor nuestro Jesucristo, la poderosísima intercesión de la Santísima Virgen, Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, de San Vicente de Paúl y de Santa Luisa de Marillac. Amén.

En este periodo de pandemia ¿Cuáles fueron y son las mayores necesidades que ha encontrado?

En un inicio de la pandemia la parte económica fue una de las dificultades más grandes, dado que nuestra principal actividad para recoger los recursos económicos del presupuesto anual, pero gracias a la solidaridad de nuestros benefactores, esa situación fue cambiando, para luego ser nuestra principal dificultad el cuidado de los ancianos a cargo, población muy vulnerable en las condiciones de salud ante la Covid- 19.

Igualmente, presentamos  la dificultad de realizar las actividades en la Fundación, para realizar las reunión con los miembros del grupo y que hasta el momento no han podido retomar la normalidad, dado que la mayoría de los miembros de los grupos son personas mayores con muchas dificultades de salud, razón por la cual sea dificultado muchísimo la prestación del servicio a los ancianos, de aquí la idea de incentivar a personas jóvenes a pertenecer a los grupos, para que este legado de servicio se transmita en generaciones y se le pueda dar continuidad a la misión.

Como Fundación Vicentina Luisa de Marillac, ¿tienen en este momento algún proyecto o actividad de espacial relevancia?

Como tal, un proyecto o actividad especifica no, seguimos nuestro trabajo en la atención de los ancianos pobres sin familia y sin recursos. Nuestro propósito es ampliar la cobertura al cupo total que tiene la obra, es decir, 35 ancianos (en la actualidad tenemos 21, por falta de recursos y personal asistencial), y así poder beneficiar a más ancianos.

Igualmente, desde que estaba María Teresita, que participó en la reunión de lideres Internacionales en Roma de Enero de 2020, se ha estado trabajando en darle cumplimiento a la solicitud para los sin techo del padre Tomaž Mavrič, CM. La Fundacion Vicentina Luisa de Marillac es propietaria de un terreno y la meta de Teresita era construir unos apartamentos para ser entregados a personas sin hogar. Este proyecto ha sido muy difícil llevarlo a cabo por la falta de recursos y la falta de Teresita, pilar fundamental de esta obra.

Finalmente, ¿puede compartir su experiencia como gerente nacional de la Fundación Luisa de Marillac?

Desde julio del año 2006 trabajo en la Fundación Vicentina Luisa de Marillac, en el hogar de ancianos que tiene el grupo, en la ciudad de Cali, Colombia, María Teresita Riascos Trujillo fue la presidenta nacional e internacional de esta obra durante 40 años, por lo que me formé, recibí información y aprendí de Familia Vicentina durante mi trabajo al lado de ella.

En Enero del 2022 fui escogida como representante del grupo a nivel nacional. Desde entonces, con la compañía de sor María Doris Ángel, asesora y orientadora de la Familia Vicentina nacional, hemos trabajado en la reestructuración de los grupos de la Fundacion Vicentina Luisa de Marillac, que se encontraban dispersos, para iniciar una nueva animación y asesoría, algo que no se logró hacer durante el tiempo que estuvo Teresita. La meta es darles un aire nuevo a los grupos, con nuevos integrantes llenos del amor a Dios y dispuestos al servicio a Dios en la persona de los ancianos pobres.

Ha sido una muy linda experiencia, he recibido asesoría espiritual y en la Fiesta de Santa Luisa de Marillac de este año realicé mi consagración al servicio en la Fundación Vicentina Luisa de Marillac. Sé que Teresita, desde el cielo, está ayudando venciendo y acompañando, porque fue ella la que luchó muchísimo por este grupo. Ahora, desde la patria celestial, nos seguirá guiando para llevar este grupo por los caminos de Dios al servicio de los pobres.

Elena Grazini