“Tú eres el mesías”

Sant 2, 1-9; Sal 33; Mc 8, 27-33.

El evangelio de hoy pone en tela de juicio la fe que tenemos en Jesucristo. Como Pedro, puedes decir cosas lindas de Jesús, pero… ¿lo conoces de verdad? ¿sabes lo que significó para Él ser el mesías? Porque en el evangelio Pedro confiesa solemnemente que Jesús es el mesías, pero Jesús no está convencido de que sepan lo que dicen y les manda callar. Jesús no quiere ser reconocido por su personalidad, o por sus milagros, sino por la fidelidad al proyecto de Dios, su Padre, proyecto que tiene que asumirse hasta las últimas consecuencias: el sufrimiento, el dolor y la muerte misma. Así se lo anuncia Jesús, pero Pedro lo lleva aparte para disuadirlo de hablar así. El reproche de Jesús es directo: “Apártate Satanás”.

Hoy nos pasa algo semejante. Todos deseamos que se cumplan los signos del reino de Dios: la paz, la justicia, la igualdad, la tolerancia, la fraternidad, etc. Pero ¿qué estoy dispuesto a hacer para construir un mundo en que reinen los valores de Dios y no los de los hombres? Hoy aprendemos que la fe no consiste en hablar bonito de Dios, sino en luchar por construir su proyecto del reino, siendo fieles, a pesar de las consecuencias que esto nos pueda traer.

Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Aarón Gutiérrez Nava C.M.