El Premio Claire y Jean Delva que la AIC otorga cada dos años, está destinado a apoyar iniciativas de las voluntarias locales para prevenir y/o luchar contra la violencia hacia las mujeres. De hecho, estamos convencidas de que la lucha contra todas las formas de violencia que sufren las mujeres, elimina un obstáculo para su empoderamiento y refuerza las acciones de lucha contra su pobreza.

Tristemente, este problema ha aumentado con el brote de la pandemia: los datos e informes revelan que se ha intensificado todo tipo de violencia contra las mujeres y las niñas, sobre todo, la violencia en el hogar, tras el encierro obligatorio y la restricción de actividades, todo esto como medidas decretadas en la mayoría de los países. En este contexto, hemos querido apoyar las iniciativas de la red AIC dirigidas a:

• Fomentar acciones de prevención, sensibilización y formación destinadas a mejorar la condición de las mujeres víctimas de violencia
• Desarrollar actividades de apoyo, acogida y atención a mujeres víctimas de violencia
• Incluir un componente específico de lucha contra la violencia contra la mujer en proyectos de lucha contra la pobreza

En respuesta a la convocatoria para el Premio Delva 2021, nos dio mucho gusto recibir 9 proyectos: 3 de África, 5 de América Latina y 1 de Asia. Después de leerlos y estudiarlos detenidamente, los miembros del jurado decidieron premiar los dos siguientes:

BURUNDI, Giheta – 60 destinatarios: Proyecto de sensibilización y formación profesional para jóvenes víctimas de violencia en actividades generadoras de ingresos. Los talleres de costura, por un lado, permitirán la confección de uniformes para estudiantes. La cría de cabras y cerdos, por otro lado, promoverá la producción de estiércol como fertilizante, la reproducción y la venta de ganado. Las campañas de sensibilización se realizarán a través de encuentros, talleres y a través de la radio comunitaria “Voz de la Mujer”.

PERÚ, Awajun-Riojas/San Martín – 360 destinatarios: En la comunidad indígena Awajun, la cultura machista está muy presente. En colaboración con las autoridades locales, las instituciones educativas y con el apoyo de las Hijas de la Caridad, el proyecto tiene como objetivo prevenir la violencia a través de la educación para la igualdad de género y el respeto por las mujeres. Se organizarán talleres de sensibilización en las escuelas tanto para profesores como para estudiantes. También promoverán actividades generadoras de ingresos (elaboración de cosméticos, panadería y costura) promoverán la reinserción profesional de mujeres víctimas de violencia.

Estos dos proyectos nos muestran la importancia de a la vez sensibilizar a un público el más amplio posible sobre el tema de la violencia hacia las mujeres y poner en marcha acciones concretas dirigidas al apoyo integral y al empoderamiento de las mujeres víctimas de violencia.

Felicitamos de todo corazón a las voluntarias de Giheta (AIC Burundi) y de Awajun (AIC Perú). Expresamos también nuestro agradecimiento a todas las voluntarias que enviaron un proyecto y a todas las voluntarias AIC que se comprometen en la lucha contra la violencia hacia las mujeres.

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A continuación, encontrarán una breve descripción de los demás proyectos recibidos:

COLOMBIA, Cartago: Fortalecimiento de capacidades y apoyo para la comercialización de productos de microempresas de 34 mujeres, madres de niños con discapacidad.

COLOMBIA, Circasia: Empoderamiento de 40 mujeres de bajos ingresos y su reintegración al mercado laboral a través de la capacitación en limpieza y fabricación, etiquetado y comercialización de cosméticos.

ECUADOR, nivel nacional: Capacitación de voluntarios de las 22 asociaciones locales de AIC sobre el tema de la violencia contra la mujer a través de la organización de seminarios presenciales y/o en línea.

NIGERIA, Adule-Abuja: Mejorar los medios de vida de 40 mujeres y 10 hombres afectados por el desplazamiento forzado proporcionándoles capacitación para mejorar su autosuficiencia, nutrición y estado de salud.

NIGERIA, Enugu: Apoyo escolar y pago de cuotas escolares para 30 niñas y 20 niños para sacarlos de las calles y evitar la trata de personas. También se hace hincapié en el empoderamiento de los padres.

PERÚ, Pisco: Empoderamiento de 80 mujeres vulnerables víctimas de violencia a través de la capacitación ciudadana y la creación de actividades generadoras de ingresos (cría de pollos).

FILIPINAS, Calauan: Acompañamiento de 20 niñas víctimas de abuso sexual y maltrato y alojadas en un centro, a través de actividades artísticas, culinarias, espirituales y de convivencia. Un enfoque psicosocial, emocional y económico tiene como objetivo restaurar su confianza en un futuro mejor.

¡Que todas estas iniciativas nos inspiren y animen a permanecer atentos y proactivos para promover la condición de la mujer!

Juntos podemos conseguir que las cosas cambien. Cada uno tiene un papel que desempeñar.

Fuente: https://www.aic-international.org/