“Los haré pescadores de hombres”
Rom 10, 9-18; Sal 18; Mt 4, 18-22.
Hoy celebramos la fiesta litúrgica de uno de los doce apóstoles: san Andrés, uno de los dos primeros que conocieron al Señor Jesús a la orilla del Jordán. La noticia de este encuentro se la trasmite a su hermano Pedro diciéndole: “Hemos encontrado el Mesías”. Entonces Jesús llama a estos dos hermanos pescadores, y les encomienda una nueva misión: Vengan conmigo y los haré pescadores de hombres. Es impresionante que ellos lo dejaron todo y le siguieron “al instante”.
Cada uno de nosotros tenemos una misión que Jesús nos ha dado y nos invita a realizar poniendo a su servicio todo cuanto tenemos y somos; se trata de dejarlo todo para convertirnos en pescadores para el Reino.
Nuestra tarea es llevar a otros hacia Jesús, como lo hizo Andrés con su hermano Pedro, pues la tarea de pescar hombres se traduce en la ayuda que, libre y generosamente, damos a quienes nos rodean para que encuentren al Mesías.
Señor Dios nuestro, que nos has llamado a una vocación y servicio para servir a los demás, deja que nuestro testimonio sea un motivo para que otros se acerquen a ti y te reconozcan.
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Seminaristas del Seminario Vicentino de Tlalpan, Ciudad de México
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