¿Qué es eso de la Familia Vicentina?

[El post apareció por primera vez en Vincentian Mindwalk]

Las expresiones «Familia Vicenciana» y «Carisma Vicenciano» son relativamente nuevas para muchos, especialmente fuera de la familia. Ciertamente no formaban parte de mi vocabulario cuando entré en el seminario, hace más de 65 años, o incluso cuando me ordené en 1965. Sólo empezamos a hablar de la Familia Vicenciana en la década de 1990.

¿Qué es la Familia Vicenciana? ¿Es una organización, una forma de pensar, una federación de organizaciones religiosas? La lista sigue y sigue.

¿Cuál es el carisma en el que se basa la Familia Vicenciana?

Cuando empecé con mi blog Vincentian Mindwalk, me hice estas preguntas. En ese momento sugerí que es una forma de ver las cosas compartida por un número de personas.

Una forma de ver las cosas

La Familia Vicenciana es una forma de ver las cosas compartida por unos 4 millones de personas.

Es una forma de ver las cosas como lo hizo Jesús… que tenía la misión de llevar la buena noticia a todos, pero especialmente a los marginados y olvidados.

Es una forma de ver las cosas adoptada por los santos Vicente y Luisa. Se veían a sí mismos siguiendo a Cristo «Evangelizador de los pobres».

Es una forma de ver las cosas que ha calado en el corazón de más de cuatro millones de personas que llevan la buena noticia a los olvidados en más de 150 países del mundo actual.

Es una forma de ver las cosas que se encarna más frecuentemente en forma de institutos religiosos… pero de ninguna manera exclusivamente, como veremos.

Es todo lo anterior y más.

La Familia Vicenciana es un movimiento

Somos personas con una misión… «hacer lo que hizo Jesús». Es una forma de tomar en serio la pregunta de Jesús en la Última Cena. ¿Entiendes lo que he hecho? Seremos reconocidos como sus discípulos si lavamos hoy los pies de los pobres y olvidados,

Sería mejor decir que el carisma vicenciano es un movimiento que se toma en serio las palabras de Jesús.

Está formado por personas que se comprometen allí donde se encuentran en la vida.

Son todos y cada uno los que reconocen la generosidad casi increíble de Dios para con ellos mismos.

Son todos y cada uno los que se dan cuenta de que nunca podrán devolverle el favor a Dios… sino «devolverlo» por el lavado de pies a imitación de Cristo.

Es lavar los pies de los demás de una manera caracterizada por las cinco virtudes o valores de Vicente…

• Honestidad (Sencillez)
• Accesibilidad (Mansedumbre)
• Autodisciplina (Mortificación)
• Realista (Humildad)
• Trabajador (Celo por las almas)

La genialidad de San Vicente y Santa Luisa fue que invitaron e inspiraron a personas de todas las clases sociales a llevar a cabo la misión de Cristo Evangelizador de los Pobres. Su genialidad fue que se dieron cuenta de que a veces ayuda organizarse y hacer las cosas en familia.

Hoy sigo manteniendo lo que escribí entonces. Pero hoy añadiría esto. El movimiento está prendiendo especialmente en los grupos de profesionales de diversos campos. Se están descubriendo unos a otros. Están haciendo una lluvia de ideas con otros de su profesión. «¿Cómo podemos nosotros (abogados, profesores, trabajadores sociales, especialistas en comunicación, etc.) utilizar las habilidades de nuestra profesión en los «hospitales de campaña» de primera línea, o movilizar a quienes están comprometidos con la búsqueda de soluciones a largo plazo?»

Sospecho que la mayoría de las ramas establecidas de la familia no son conscientes del fuego vicenciano que arde en sus corazones. He oído hablar de nuevos grupos que están surgiendo, especialmente, pero no exclusivamente, en el mundo de habla hispana.

P.D. Esta última dimensión es una manifestación del siglo XXI de lo que Vicente llamaba «cofradías».

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