“No temas, en adelante serás pescador de hombres”
1 Cor 3, 18-23; Sal 23; Lc 5, 1-11.
Simón Pedro y sus compañeros, confiando en la Palabra de Jesús echaron las redes y obtuvieron sorprendente pesca, después de su inútil esfuerzo de toda la noche.
Luego de semejante experiencia, cómo ger inmediatamente la llamada, la propuesta a ser pescadores de hombres, aunque implicara un cambio de planes tan radical; seguirle, aunque supusiera dejarlo todo, sin otra certeza que ese “no temas”, a pesar de tu fragilidad, yo estoy contigo, cuentas conmigo.
Es la presencia viva del Señor, la que va a permitir cumplir el proyecto de Dios para nuestra vida.
Me pregunto: ¿A qué me está llamando a mí ahora, a qué me está invitando? ¿Dejo que Dios actúe en mí? El encuentro con el Señor ¿me pone en actitud de servicio, de disponibilidad?
¿Confío en que la fuerza de su Palabra me permitirá, nos permitirá, llevar a muchos esa buena noticia de que Dios nos ama, de que cuenta con nosotros para extender su Reino?
¡Confiando en tu Palabra echaré las redes!
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
María Mares Padilla HC
0 comentarios