“Felices de cumplir lo mandado”

Hech13, 13-25; Sal 88; Jn 13, 16-20.

Hoy Jesús y sus discípulos están (estamos) sentados a la mesa de la comunión. Jesús, con su propia vida, les da testimonio de la felicidad que experimenta al cumplir la voluntad del Padre. Llevar a cabo su misión le implicará entregar la vida, pero Jesús confía plenamente en el Padre, que lo envió, y en fidelidad a él lleva a término su obra redentora.

Reflexionemos sobre ello con la siguiente historia: San Francisco mandaba a sus seguidores a sembrar coles con las raíces para afuera y las hojas para adentro. Sin embargo, no faltaba un “inteligente” que le refutara: “En mi tierra las coles se siembran con la raíz en la tierra, no afuera. No tiene sentido sembrar las hojas…” Entonces, el santo le contestaba: “Pues vaya entonces a sembrar coles a su tierra. Aquí no queremos especialistas en agronomía, sino en obediencia”.

A nosotros también nos dice Jesús: ¡Felices serán ustedes si cumplen lo que les he mandado! Y lo que Jesús nos pide es que andemos en su amor, manifestado en cumplir la voluntad del Padre.

Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Sor Elizabeth Sánchez Rangel, H.C.