Hch 17, 15-16. 22-18, 1; Sal 148; Jn 16, 12-15.
“El Espíritu de la verdad los guiará hasta la verdad completa”
Durante esta semana el evangelio que hemos venido reflexionando ha sido tomado en su mayoría de los capítulos 14 al 16 de Juan, y las lecturas del libro de los Hechos de los Apóstoles. Esto nos deja ver no sólo lo que sucedió antes de la pasión de nuestro Señor, sino que también nos da una visión de cómo era la vida de fe de las primeras comunidades cristianas después de la resurrección de Jesús.
El Maestro se despide de sus discípulos, el tiempo se ha cumplido y aún queda mucho por enseñar a sus amigos, sin embargo, la hora de su partida está ya cerca. El plan que había iniciado estaba inconcluso y sus discípulos aún no habían comprendido las exigencias de este plan. Por ello no los deja desprotegidos, les promete que el Espíritu Santo vendrá en su ayuda, y es ésta la experiencia que logran tener las primeras comunidades cristianas, pues en la medida que trataban de seguir a Jesús e interpretarlo en su vida cotidiana, descubrían en medio de ellos la luz del Espíritu Santo. Sentían de forma muy viva su fuerza y su consejo –aún lo podemos sentir– llevando a su cumplimiento la obra de Jesucristo.
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Seminaristas del Seminario Mayor Vicentino de Tlalpan, Cd. de México
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