Ef 4, 1-6; Sal 23; Lc 12, 54-59.

“…pero no saben leer los signos de los tiempos

Diariamente nos preocupamos de ver signos que muestren cambios en el clima, pero Jesús nos aconseja esforzarnos más por trabajar en nuestra relación con Dios. La maniobra más sabia sería arreglar nuestros asuntos mientras tengamos la libertad de hacerlo. Al ponernos ante Dios en oración, debemos buscar este caminar en nuestros corazones, con honestidad y humildad, y pedirle que rectifique nuestros pasos.

Jesús me dice que juzgue por mí mismo lo que es correcto: ¿Permito al Espíritu hablar a mi conciencia, de manera que no siga las tendencias del momento, sino que en cambio siga la inspiración de Dios? ¿Qué me están diciendo los signos de hoy en mi vida? ¿Entiendo mal algo? Por ejemplo, me duele algo que no me dolía, eso me dice que estoy envejeciendo. O tal vez, ¿estoy empezando a sentir rechazo por alguna persona?, ¿qué hago en favor de la aceptación incondicional? Pero, ¿cómo conecto todos esos hechos con mi relación con Dios?

Señor, remueve la nube de mis ojos e inspírame para actuar en tu verdad, para que pueda simplemente amar.

Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Adrián Acosta López, CM