“Y les dijo: «La mies es mucha, y los obreros pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies”. (Lc 10,2)
No tengan miedo de escuchar al Espíritu que les sugiere opciones audaces, no pierdan tiempo cuando la conciencia les pida arriesgar para seguir al Maestro.
Pincha aquí para descargar esta presentación en Power Point.
Fuente: http://filles-de-la-charite.org/
0 comentarios