Gén 44, 18, 21-23; 45, 1-5; Sal 104, 16-21; Mt 10, 7-15.
“Gratis lo recibieron, denlo gratis”
¿Quieres un mundo y un país más justo, más acogedor y fraterno, más bello y pacífico? Toma un micrófono en mano, sal a la calle y haz esta pregunta a todo el que te encuentres. Verás que todos dicen que así lo quieren. Pregúntaselo a Jesús de Nazaret y a Barrabás y ambos te dirán lo mismo. Igual que tus vecinos de comunidad.
El problema está en los medios que ponemos para lograrlo. Barrabás lo quería lograr por medio de la violencia, anulando o matando a sus opositores. Otros lo quieren desde su cómodo aislamiento del no hacer nada. Jesús lo quería y lo quiere dando la vida para que nos amemos y dejemos de matar y de morir. Por eso, la pregunta de Pilato a la multitud sigue siendo la pregunta de cada día: ¿A quién quieren que ponga en libertad a Jesús de Nazaret o a Barrabás?
En el evangelio de hoy, Jesús habla de los medios para anunciar el Reino. No cualquier anuncio del Reino de Dios es anuncio verdadero. Hay medios y formas de anunciarlo que lo contradicen y lo anulan. Y hay laicos y pastores que, en lugar de atraer, espantan… “Gratis lo recibieron, denlo gratis”.
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Honorio López Alfonso, cm
0 comentarios