Tob 12, 1.5-15. 20;Tob 13; Mc 12, 38-44.

“Esta viuda, en cambio, ha echado todo lo que tenía para vivir”

Esta página es un contraste entre los letrados y la pobre viuda. A los letrados judíos “les encanta pasearse con bellos ropajes y que les hagan reverencias, buscan los asientos de honor y los primeros puestos”. Mientras que la viuda pobre se acerca a la alcancía del templo de un modo discreto, sin imaginar que le están mirando nada menos que Jesús y sus discípulos. Deposita allí dos reales, ha echado más que nadi porque ha echado todo lo que tenía para vivir.

Dos actitudes de vida que nos ayudan en nuestro caminar cristiano diario. Unos utilizan la religión para buscar su propia gloria y explotar a los más pobres, otros una confianza total en Dios y una esperanza plena. La crítica de Jesús a los escribas es dura. En vez de orientar al pueblo hacia Dios y su Reino, buscan atraer a la gente hacia sí mismos buscando su propio honor. La viuda, por el contrario, actúa de manera prudente, callada y humilde. Estas personas, sencillas pero de corazón grande y generoso, ¡cómo nos enseñan!, todos nos hemos encontrado con alguna persona así. Saben amar y dar sin reservas. Testimonios así en nuestra iglesia mantienen vivo el mensaje de Jesús y nos enseñan a creer de verdad en Dios, De estas personas hemos de aprender a seguir a Jesús.

¿Con cuál de las dos actitudes me identifico?

Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autor: Blanca López Leija, HC