Ez 43,1-7; Sal 85, 9-14; Mt 23,1-12.
“Sólo necesitamos Ser”
«Todo lo hacen para que los vea la gente”. Cuenta la historia que Herodes, recordado por la matanza de los niños y reconocido por las grandes construcciones hechas en su tiempo, quiso ganarse al pueblo judío dándoles trabajo e incrementando el desarrollo del comercio y la agricultura.
Desde luego buscaba en todo su fama, reconocimiento y engrandecimiento de su poder, aunque era evidente que la vida de intrigas, corrupción, mentiras y persecuciones que llevaba era algo capaz de enloquecer a la persona más cuerda. “Que el mayor de entre ustedes sea su servidor, porque el que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido”.
Herodes y escribas y fariseos equivocaron su camino. Se vendieron al teatro de las apariencias y su “Dios” era la opinión ajena. “Todo lo hacen para que los vea la gente”.
También nosotros podemos estar viviendo de una forma parecida a ellos, en medio de nuestras propias miserias humanas, sin darnos cuenta de que la única mirada que necesitamos para hacer las cosas es la de Dios. No grandes cosas: en la atención cordial, delicada y tierna que ofrecemos al más pequeño, ahí Dios nos reconoce y nos valida con su amor.
¿Estás dispuesto a dejarte encontrar por la mirada de Dios?
Fuente: «Evangelio y Vida», comentarios a los evangelios. México.
Autora: Yolanda Elvira Guzmán, H.C.
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