Día de Oración y Ayuno Vicentino
martes 02 de noviembre 2015
Año de la Vida Consagrada
Carril Expreso Vicentino- Gracia para todos los necesitados – Proteja su corazón – Viviendo las Bienaventuranzas

Querida familia Vicentina. ¡Qué momento tan alegre tuve en Denver, Colorado, en el encuentro y el aprendizaje de la familia y en toda esta reunión especial. Por momentos me sentí abrumada por los altavoces y la información, pero también estaba muy honrada de ser parte de esta familia. Dios verdaderamente nos bendice y está siempre con nosotros y no solamente en esta reunión. Jóvenes y viejos de dos países, compartiendo, respetándose mutuamente y aprendiendo los unos de los otros; esa fue la recompensa por asistir. Les pido que oren conmigo por todas las organizaciones que hacen cosas increíbles en esta Familia Vicentina. Conozcámoslos. Haga una investigación sobre famvin.org y usted se sentirá feliz de haberlo hecho. Las personas que ya lo están haciendo y otras venideras, nos pueden enseñar mucho. Dios sea con todos ustedes.

Bendiciones, Lynn

Carril Expreso Vicentino – Algunos días nuestro trabajo es una falta de definición. Tratamos de realizar todas nuestras visitas y juntar las cestas llenas, lo más rápido posible. Debemos recordar que debemos movernos del carril expreso, especialmente en este tiempo ocupado. También sabemos que simplemente se pondrá más ocupado. Tenemos que movernos a un carril que se mueva lento, y servir a Jesús con amor y alegría, dando dignidad junto con la comida. Al hacer las citas permitamos el suficiente tiempo de por medio para dar a cada persona y su familia, el tiempo que se merecen. Este es nuestro regalo y nuestro carisma vicentino. Ore con su pareja al hacer un cesto navideño, en el camino a la visita, mientras lo ofrece, y después de la visita. Usted tiene el poder de hacer que las cosas sucedan, para hacer el cambio por la Gracia de Dios. Recuerde que debe estar presente y no se preocupe lo que está al lado. Dios está siempre con usted. Use el poder de la Santísima Trinidad y será totalmente bendecido y también lo serán aquellos a quienes servimos. Tenga esto en cuenta en las próximas semanas y podrá disfrutar del servicio a todos nuestros amigos.

Gracia para todos los necesitados – ¿Está usted consciente de que somos salvos por la gracia? “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no es de vosotros, pues es un don de Dios.” (Efesios 2: 8) Debemos creer. Cuando creemos la verdad, la gracia de Dios entra en nuestro corazón y nos cambia. La fe trae la gracia, pero la gracia trae cambios. Dios nos ha dado el don de ser llamados como siervos Vicentinos. Somos bendecidos. Tenemos muchos modelos a seguir. Leamos las Cartas y Espiritualidad de Ozanam. Estudiemos la Espiritualidad de la Hermana Beata Rosalie y de Santa Luisa de Marillac y por supuesto las escrituras de San Vicente de Paul. El mejor estudio para nuestro servicio y el amor por los que están en la pobreza, está en las Escrituras. Mantengámoslas con nosotros siempre. Jesús sirvió a todos. Él nos enseñó a servir sin juicio. Usted sabe que si la gente pudiera hacer bien aquello por lo que les criticamos, no nos necesitarían.

Les debemos mostrar el camino con amor para levantarlos de su pobreza, espiritual y material. A veces se necesita tiempo. Envolverlos a sí mismos en la Gracia de Dios y siempre tener a la Santísima Trinidad con usted en su corazón. Las cosas van a ser grandes.

Proteja su corazón – Cuide su corazón con la justicia de Jesús. A veces tenemos la corazonada de un sentimiento real en nuestro corazón, pero asegúrese de que es lo correcto. El servir a los necesitados, especialmente en los casos difíciles, se basa en obtener ayuda. Es por eso que viajamos en parejas y por eso oramos antes, durante (en silencio) y después de cada visita. Una breve oración para mantener en su corazón durante la visita es: “Yo creo en Dios, confío en Ti, Señor. Confío en su ayuda. Creo y confío en ti.” Usted sentirá una sensación de confort y el miedo que tenía se habrá ido con la presencia de Dios. Estamos facultados, y nuestros corazones se sienten puros con nuestro servicio y nuestra etiqueta de coristas especiales de la Santísima Trinidad. La Trinidad protegerá su corazón y le guiará en su visita, antes y después. El momento en que diga “Sí,” nuestro corazón estará en lo correcto. La justicia de Jesús nos da el poder, a pesar de que pecamos, y guardará nuestros corazones en la medida en que trabajamos juntos por la justicia, la alegría y la paz de todos aquellos a quienes servimos. Ellos son nuestros amos y oramos por ellos; nos perdonan, por llevarles el pan.

Viviendo las Bienaventuranzas – Bienaventurados los pobres de espíritu, porque el reino de Dios es de ellos. ¿Qué opina Mateo sobre lo que significa ser pobre en espíritu? ¿Qué significa hoy en día? Esto hace un buen tema para una buena discusión. Me gustaría pensar en lo que muchos dirían que se refiere a todos nosotros, porque todos sufrimos la soledad, el dolor, el desánimo y muchas pruebas en la vida. Si usted lee el comentario de la Biblia verá, “pobres de espíritu” son los que están en la pobreza. Son las profundidades en la boca de su estómago hambriento, sin trabajo, sin hogar. Ellos sufren de adicciones, y algunos son encarcelados. Ellos son los económicamente pobres. Creo que a veces podemos ser “pobres de espíritu” cuando aprendemos a conocer y a entender a los que servimos en la pobreza. Ofrezco desafíos a menudo a los que sirven, a vivir por un mes o una semana en lo que los pobres de espíritu tienen que sobrevivir. Yo pensaría que la mayoría de nosotros falla el reto, pero creo que ellos entenderían más que antes. Trate el reto y siempre ame y haga el servicio a Cristo que está en los pobres de espíritu. Usted es la presencia de Cristo, sirva a los quebrantados de Cristo.

Tengan una buena semana y acuérdense de orar por nuestros jóvenes, muchos de ellos estaban en la reciente reunión de la familia en Denver. Oremos por nuestro maravilloso papa Francisco, que estoy convencida, es un Vicentino. Oremos por toda nuestra Familia Vicentina, especialmente los que trabajamos juntos y por nuestros sacerdotes, obispos, diáconos y seminaristas. Oremos por todos en famvin.org Son sorprendentes.

Lynn