Día de Oración y Ayuno Vicentino
Martes 23 de diciembre 2014
Adviento Cuarta Semana – Reconciliación Caos de Navidad – Encarnación
Querida Familia Vicentina: Estamos en los últimos días de la espera. Hemos sopesado a la sociedad con la Iglesia y espero que la Iglesia haya ganado. Verdaderamente sentí que hubo más gente diciendo: «¡Feliz Navidad!,» este año en las tiendas. Creo que es debido a los trabajadores filipinos en nuestras tiendas. Usted puede ver a Jesús brillando en sus ojos. Hay alegría en todas partes y la alegría debe de ser la prioridad. Somos amados y debemos mostrarlo a todos con nuestras caras sonrientes y miradas de alegría. Todo está bien con Dios y su amor es eterno. Que todos tengamos una Feliz Navidad, una Navidad Feliz y Bendecida. Oremos siempre por los necesitados y por los que sufren en silencio. Oremos por todos nuestros clérigos y nuestro amado Papa Francisco y nuestros jóvenes. Por supuesto oremos por nuestra familia Vicentina. ¡Amén!
Adviento Cuarta Semana – El amor es el tema. Amar como Jesús amó. Durante este tiempo de Adviento, esperamos en la oscuridad, juntos. Nuestra fe nos dice que la luz se acerca y así como la estrella iluminó el camino de los Reyes Magos a Belén, nuestra fe nos llevará a su fuente, que es Jesús, quees el amor.
«El pueblo que caminaba en tinieblas vio una gran luz; los que moraban en tierra de sombra, de muerte, sobre ellos una luz resplandeció” (Isaías 9: 2).»
“Amaos los unos a los otros como yo os he amado”. (Juan 13:34) encendamos la última vela morada y en la víspera de Navidad, coloquemos una vela blanca en el centro. En particular, con mi familia encendemos la vela blanca en la víspera de Navidad y cantamos feliz cumpleaños a medida que avanzamos a María y a José hacia el establo y colocamos a Jesús en el pesebre. Ha llegado el momento, sin embargo seguimos esperando para la segunda venida. Estemos preparados; permanezcamos activos y celebremos con ese mismo amor.
Reconciliación – Mientras escribo esto, mi mente está en la reconciliación que se celebra esta noche en mi Iglesia. Me gusta ir a la reconciliación con regularidad, tal vez no tanto como debería. Sin embargo, el servicio de la reconciliación especial en la iglesia por lo general en el Adviento y la Cuaresma es una experiencia conmovedora. Todos somos pecadores y en estos eventos en que vemos a cientos en cola para hablar a 6 u 8 sacerdotes, y reconocer ante ellos que son pecadores. Esto es un gran regalo de la Iglesia. Uno puede ver el antes y el después de la foto de la reconciliación de viejos y jóvenes con Dios y también la reconciliación de aquellos que han sido heridos o lastimados por alguien. Sí, todos somos pecadores y Dios nos perdona todo el tiempo. Sólo tenemos que pedir ser perdonados. Todos necesitamos la reconciliación. Nuestros corazones se obstruyen con los pecados de todos los días. Generalmente no tenemos grandes pecados, pero todavía necesitamos una limpieza al igual que nuestros coches o nuestras casas. No nos detenemos en la limpieza de nuestro coche o de la casa y es muy importante limpiar la casa internamente. Todos estamos siendo llamados a la reconciliación; que nos aproveche.
Caos de Navidad – Tratemos a como podamos, pero todavía quedamos atrapados en el caos de la Navidad. Generalmente soy un comprador tempranero, pero este año no tanto. Me gusta aparcar a cierta distancia de una tienda y rezo mientras camino entre las multitudes inevitables y veo el terror en sus rostros. Este año, mi poder de compras para todos nuestros regalos ha sido increíble. Este año vi la verdadera alegría, tanto en los compradores cansados y el personal muy cansado en las tiendas. Hubo muchas sonrisas y muchos saludos de «Feliz Navidad». No se encontró todo en nuestra lista, pero no importaba. Somos lentos en conseguir nuestras decoraciones, pero que lo estamos logrando. Nuestra primera decoración es la corona de Adviento y es el centro de las cosas. El día era tan agradable a pesar del frío. Había niebla; rara vez conseguimos niebla o humedad en Calgary, mi ciudad de residencia. La escarcha en los árboles era un don mágico de las pinturas blancas de Dios. ¡Una obra maestra! Mi caos se había ido. El amor fluyó a través de mí y cada detalle ahora no es una tarea, sino una preparación feliz por la celebración de Cristo – El Salvador del mundo.
Encarnación – En RICA estamos enseñando la Encarnación esta noche. En la encarnación ¡Dios se hizo hombre! Esta es la culminación de nuestra preparación de Adviento. Es increíble la verdad del nacimiento de nuestro Señor.
Todo lo que lleva a la Navidad y la Epifanía en la fe cristiana se conoce como Encarnación. ¡Dios se hizo hombre! Su nacimiento ilustra su humanidad y humildad. Fue concebido por el Espíritu Santo y nacido humano, al igual que nosotros en todo menos en el pecado. Él es el elegido. Todo sobre su nacimiento y la muerte es proclamada por los profetas. La encarnación en simples palabras de Juan: “El Verbo se hizo carne”: Jesús, el Hijo de Dios, nacido de la Virgen María (ella nació sin pecado), se hizo hombre para completar a Dios, tres personas en una – Padre, Hijo y Espíritu Santo; la Trinidad: vívelo ésta Navidad.
Bendiciones,
Lynn
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