Día de Oración y AyunoVicentino
Martes, 14 de octubre del año 2014
Ángeles de la Guarda – ¿Soy un Buen Servidor? – Las Verdaderos Relaciones – Llenar el vacío

Querida Familia Vicentina: Dios es un amante hambriento de ser amado a cambio. Quemándonos con esa visión de fe con que nos desafía a través de todos los ángeles y santos para vivir el Evangelio y para ver a Jesús en todos los que sufren. Nos empeñamos a nosotros mismos para ver a Dios en todo el mundo y tenemos el reto de perdonar a todos. Ansiamos orar para pedir ayuda, sabiendo que orar siempre es una elección acertada. También pedimos a María, Reina del Rosario, Madre de Jesús que nos ayude a abrir nuestros corazones en oración para todos aquellos que están en peligro. Recordemos siempre a todos los clérigos, a nuestros jóvenes, seminaristas y a aquellos a quienes servimos. Ustedes están en mis oraciones siempre, yo les he puesto en la palma de mi mano. Que siempre sientan el amor perfecto de nuestro Dios.         Amen.

ÁNGELES GUARDIANES – Ángeles de la Guarda – ¿Todavía crees en tu Ángel de la Guarda? Los hijos de Dios! Veamos todos en el espejo y veamos al niño que llevamos dentro. Somos hijos de Dios y Su amor por nosotros es para siempre y un día, la eternidad. Cuando éramos niños, oramos a nuestro ángel de la guarda cada noche. Me fasciné con los ángeles en la escuela secundaria y empecé a recopilar historias y ángeles de cerámica. Cada vez que algún ser querido fallecía, escribía su nombre en la parte inferior de un ángel. Una vez leí que uno debe de saber el nombre de su ángel de la guarda y que sólo tenía que rezar y pedirle a él. Oré y oré y en pocas semanas todos los ángeles gritaban «Miguel«. Supongo que no soy un buen oyente. Así, Miguel, mi ángel de la guarda y yo, empezamos a hablar y él me acompaña siempre en cada visita a los necesitados. Encontremos el niño en nosotros mismo y recibamos todos los dones que Dios nos da. Hablemos con nuestros ángeles de la guarda y llevemos a nuestro ángel de la guarda con nosotros mientras servimos y busquemos a Jesús en los más necesitados. A menudo hemos sido llamados ángeles por los necesitados. No me siento como un ángel, pero mi ángel y la Trinidad están siempre conmigo y guiando mis palabras y acciones con los necesitados. Necesitamos toda la ayuda divina que podamos conseguir. Ángel de Dios, mi ángel de la guarda,

¿Soy un buen servidor? – Dios nos está llamando a trabajar juntos. Si estamos tratando de ser santos y buscamos la santidad, debemos saber que los santos son valientes y creativos. Dicen «sí» a Dios y nunca se confunden con el mundo. Ellos se mantienen firmes en el amor de los demás y es todo, o nada. Los Santos también luchan, al igual que nosotros. Mi frase favorita es «Los santos son los pecadores que siguen intentándolo!» Nosotros no estamos diseñados para ser egoístas. Ser un siervo significa amar a todos los que Dios pone ante nosotros. Pensemos en el Buen Samaritano(Lucas 10). Estamos hechos ala imagen de Jesúsy estamos llamados aservir yser siervos para los necesitados. Marcamos la diferenciaal mostrarel amor de

Dios en nuestras acciones. Dios aprecia el que compartamos su verdad con los demás con nuestro servicio. Cuando usted tiene una gran relación con Dios, eso se nota en el amor y el servicio que le damos a los necesitados. Bien hecho siervo fiel.

Llenando el vacío con Nuestro Señor: Cuando estamos vacíos, Dios nos invita a compartir el alimento sin el cuál nosotros no podemos vivir: la Eucaristía. Este es el alimento divino que nutre nuestras almas. Es la única comida a la que nunca debemos faltar. Cuanto más tenemos, más necesitamos y mejor nos sentimos, es un milagro santo que nos hace cambiar cada día. Cuando me arrodillo ante el Santísimo Sacramento, mi oración es muy significativa. En la contemplación le doy más de mí mismo a Dios. Me voy sintiendo una respuesta a todas mis oraciones y me llena de alegría. Yo lo siento, me gusta y disfruto de su fragancia. Me presento ante Él y sé que es mi Dios y sé de su amor. Donde había odio, ahora sólo hay amor. Realmente no me gusta la frase, «la vida es corta«, porque la vida es sin duda el regalo más maravilloso y el regalo más largo de Dios que alguno de nosotros va a experimentar. Cuando llenamos el vacío es porque sentimos un verdadero amor por Dios y por los demás y se nota la diferencia. Usted puede cambiar el mundo, un paso a la vez y una visita a la vez.

Bendiciones,

Lynn

(Oración Vicentina para el 13 de octubre, 2014. Traducida al español por Jess Camalari)