EL ÉXITO NO ES DEFINITIVO, EL FRACASO NO ES FATAL: ES EL CORAJE DE CONTINUAR LO QUE CUENTA.

WINSTON CHURCHILL

Hay un relato en el Evangelio de Juan en el que Jesús se aparece a sus discípulos después de su resurrección. Estaba de pie en la orilla del lago, junto a una pequeña hoguera, con algo de pan y pescado, y les invitó a comer con él diciéndoles: «Venid a desayunar».

Venid a desayunar. Qué gesto tan sencillo, cariñoso y ordinario tuvo Jesús con sus discípulos. Era su manera de decirles: Sigo estando con vosotros y a vuestro lado. Es un gesto que Jesús tuvo muchas veces a lo largo de su ministerio con amigos, familiares y desconocidos.

Al reflexionar sobre esta historia, podemos ser conscientes de todas las formas en que tantas personas están extendiendo igualmente esos gestos considerados y afectuosos en tiempos difíciles, haciendo saber a los demás que ellos también están con ellos y aquí para ellos. Este tipo de ayuda es testimonio de la resiliencia de las personas y de la comunidad en general.

A lo largo de su vida, Jesús cultivó una comunidad de amigos e invitó a otros a unirse y ser sus compañeros. Fue un modelo de cómo replantear las situaciones para invitar a los demás a cambiar sus perspectivas y abrir sus corazones a nuevas comprensiones, por ejemplo, tratando de cambiar la visión cultural del mundo de la época del juicio a la compasión. Demostró una gran determinación al seguir predicando su mensaje de amor y aceptación en medio del rechazo y el conflicto.

A lo largo de la vida se nos desafía individualmente y como sociedad a desarrollar una espiritualidad de la resiliencia. Al hacerlo, se nos ha puesto a prueba, hemos tenido que ser adaptables, hemos tenido que ser moldeables en algunos aspectos y, a veces, nos hemos desanimado cuando no hemos cumplido los plazos o alcanzado los objetivos o no hemos podido ayudar a los compañeros de la manera que hubiéramos deseado. En todo esto, es importante recordar (y creer y saber) que no estás solo en esta andadura.

Aunque seamos responsables del presente, seguimos construyendo juntos el futuro sabiendo que siempre habrá factores externos inesperados y contratiempos imprevistos en el trabajo que hacemos como Sociedad de San Vicente de Paúl. Esto forma parte de la vida. Seguimos avanzando sabiendo que muchas de estas cosas escapan a nuestro control, por difícil que sea aceptarlo y reconciliarse con ello. Juntos estamos replanteándonos cómo vivir el presente y tener esperanza en el futuro. Nuestra determinación es grande, y confiamos en que Dios nos bendecirá con las gracias suficientes para proceder en este momento mientras trabajamos en colaboración para dar forma a una sociedad más justa y compasiva.

PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR

• ¿Dónde has experimentado o presenciado la resiliencia, en ti mismo o en otros?
• ¿De qué manera valoras la resiliencia?

De: Firewood for the soul, vol. 2, A Reflexion Book for the Whole Vincentian Family
Sociedad San Vicente de Paúl, Queensland, Australia.
Texto de: Samantha Hill y James Hodge.