La Familia Vicenciana en Río de Janeiro está poniendo en marcha el Proyecto 13 Casas, una campaña mundial que celebra el 400 aniversario del Carisma Vicenciano, cuyo objetivo es construir casas y dar dignidad a los que no tienen dónde vivir. La acción en Río de Janeiro construirá ocho casas para albergar a familias que viven en la extrema pobreza en el barrio de Sepetiba, en la zona oeste de la ciudad.
Las viviendas se construirán en dos parcelas y las obras se realizarán en colaboración con tres empresas de ingeniería, que harán los trabajos a precio de coste. La Familia Vicenciana contará con la participación y colaboración de todos para amueblar y equipar las casas con electrodomésticos, utensilios de cocina, ropa de cama y baño, armarios, sofás y todo lo necesario para el funcionamiento básico de un hogar. El objetivo es entregar las ocho viviendas en abril de 2023.
Las 13 casas de Vicente – La inspiración del proyecto de las 13 casas se remonta al año 1643, cuando san Vicente de Paúl recibió una donación en efectivo del rey Luis XIII para invertir en la misión de su congregación. Vicente decidió utilizar el dinero para construir 13 pequeñas casas cerca de San Lázaro, donde se hallaba la Casa Madre de la Congregación de la Misión en Francia, para atender a los niños abandonados. Vicente vio una necesidad y respondió con acciones concretas. Los gastos de funcionamiento de estas casas corrían a cargo de las Damas de la Caridad, mientras que las Hijas de la Caridad se ocupaban de los niños. Trabajando juntos, la Familia Vicenciana ayudó a salvar a miles de niños que habrían muerto en las calles.
Actualmente nos enfrentamos a los mismos problemas que Vicente en la Francia del siglo XVII, pero a escala mundial. De los casi 8.000 millones de personas que viven en el planeta, cerca de mil millones no tienen hogar y viven en condiciones precarias, en barrios marginales o en las calles de nuestras ciudades, según datos de Naciones Unidas. Muchas de estas personas son rechazadas en su momento de mayor necesidad, un crudo recordatorio de aquellas palabras que empañan la alegría de la narración del nacimiento de Lucas: «No había sitio para ellos en la posada» (Lucas 2,7). La Campaña «13 Casas» se creó como respuesta a esta realidad, aprendiendo y tomando prestada la labor del propio san Vicente.
Proyecto 13 Casas Río de Janeiro – Las seis familias elegidas por las Hijas de la Caridad para beneficiarse del proyecto en Río de Janeiro tienen vínculos de sangre. La matriarca, Iara Barbosa, tiene 55 años y nació en una familia de mariscadores. Su principal fuente de ingresos era la pesca y el marisqueo en la playa de Sepetiba. Pero la contaminación de la playa tras la instalación del Puerto de Sepetiba hizo imposible la pesca y redujo drásticamente la cría de mariscos. Como resultado, sus ingresos y los de sus familiares se vieron directamente afectados y comenzaron a trabajar como recolectores de material reciclable, que intentan vender para ganarse la vida. Las familias de Iara y de sus seis hijos suman 36 personas, la más pequeña de las cuales tiene seis meses. Viven en seis chabolas en el mismo terreno, sin saneamiento básico ni condiciones mínimas de higiene y bajo una total inseguridad alimentaria.
El terreno en el que viven actualmente las familias se transformará en un cobertizo para depositar el material reciclable que recojan. Se convertirá en el lugar de trabajo de las familias. Además del cobertizo, también se construirán dos casas en el mismo lugar, una de las cuales será el hogar de Iara, y la otra será la casa de uno de sus hijos, que junto con ella se encargará de gestionar el cobertizo.
Acciones de la Familia Vicenciana en América Latina – La campaña global «13 Casas» ya ha realizado acciones en América Latina, en el estado de Paraná y en la ciudad mexicana de Hueyapan, que fue golpeada por un terremoto en 2017, cuando el 80% de las casas fueron destruidas, incluyendo la parroquia y el ayuntamiento. En ese momento, la movilización de la Familia Vicenciana fue decisiva para la reconstrucción de la ciudad. «Nos dimos cuenta de que uniendo esfuerzos podíamos conseguir cosas importantes para mucha gente», dijo un voluntario mexicano de la FAMVIN. Vea el vídeo:
Fuente: https://filhasdacaridaderj.org.br/
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