Carta de la Comisión de Pastoral Indígena del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM)

por | Jun 21, 2022 | Confraternidades, Formación | 0 Comentarios

Queridos Hermanos y Hermanas de la Familia Vicentina,

¡Que la paz del Señor sea siempre con ustedes!

En este momento de gracia en nuestra Iglesia, cuando retomamos el compromiso de “caminar juntos” en procesos de escucha y sinodalidad, queremos presentarles una carta que la comisión de pastoral indígena del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) ha enviado a los obispos, particularmente, a los que hacen su servicio en zonas indígenas.

Reflexionando sobre el contenido de la carta, reconocemos su importancia y relevancia para la Familia Vicentina, los indígenas vicentinos y las muchas ramas que viven el privilegio de acompañarlos.

Por eso, queremos animales a leer, compartir y aplicar las exigencias de esa carta, que nos invita a vivir nuestro carisma donde los marginados y excluidos tomen el lugar céntrico en la vida de la Iglesia y donde las voces históricamente sofocadas, sean las primeras voces que respetemos y escuchemos.

En Cristo,

Confraternidad Indígena Vicentina

*******************************

Apreciados Obispos del Cono Sur, Región Amazónica, Países Andinos, México y Centroamérica:

Reciban un saludo de paz y bien para cada uno de ustedes en sus diversas jurisdicciones eclesiásticas a lo largo y ancho de nuestra región.

Hacemos llegar esta carta como Comisión de Pastoral Indígena, la cual hace parte orgánica del CELAM dentro del Centro de Programas y Redes de Acción Pastoral CEPRAP, como ha sido ratificado por su presidencia. Somos un grupo de representantes de los procesos y experiencias de pastoral indígena y pueblos originarios de América Latina y Centro América. También, esta carta tiene la intención de dar seguimiento al Desafío No. 12 de la reciente Asamblea Eclesial de América Latina y El Caribe, que pide “Acompañar a los pueblos originarios y afrodescendientes en la defensa de la vida, la tierra y las culturas”.

Nos encontramos viviendo el proceso ya en camino «Por una Iglesia Sinodal: comunión, participación y misión», conocido como Sínodo de la Sinodalidad, y celebramos cada uno de los esfuerzos que ustedes ya se encuentran realizando en sus diversas iglesias locales. En esta primera fase del proceso de escucha del sínodo sabemos que se están aplicando estrategias para escuchar al Pueblo de Dios, y así aportar de manera contundente a las reflexiones de cómo podemos caminar hacia una Iglesia más Sinodal.

Concordamos con el Santo Padre en reconocer que el Sínodo no es un evento específico, ni un sondeo de opiniones, sino es un momento eclesial, donde el principal protagonista es el Espíritu Santo expresado en los dolores, esperanzas y sueños de su pueblo. Por ello, es fundamental que asumamos con decisión y valentía la invitación para experimentar la Comunión, Misión y Participación de todos los fieles y miembros que componen nuestras iglesias locales.

Sin embargo, también vemos con preocupación que aún se requieren mayores esfuerzos para garantizar la escucha real y adecuada a los grupos de los márgenes, sobre todo a los pueblos indígenas en los espacios asamblearios y locales. En algunos casos, las estrategias para la sistematización de los aportes pueden recortar e invisibilizar la palabra de los pueblos, y en otros, es necesario mayor esfuerzo para garantizar su presencia protagónica o activa en los diversos espacios de diálogo, y en continuidad con el Sínodo Amazónico y la Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe.

Por ello, hacemos un llamado a todos ustedes, para que en el tiempo que queda de los meses mayo, junio y julio, puedan reforzar la convocatoria y la metodología de la escucha sinodal posibilitando una mayor participación activa de los pueblos indígenas y originarios de sus territorios.

Animamos también, a que su presencia no sea solo la asistencia a un evento, sino que se vea reflejado en una verdadera praxis sinodal, atendiendo a sus reflexiones, promoviendo su implicación real, para la comunión y misión compartida como Pueblo de Dios y darles el puesto que hasta el presente muchas veces se les ha negado por desconocimiento y temor. Solo escuchando a todo el Pueblo de Dios, en toda su diversidad cultural y espiritual, seremos capaces de escuchar la voz del Espíritu.

Nos disponemos como Comisión a acompañar, colaborar en lo que haga falta, y a dar algunas luces que puedan requerir en el proceso. Elaboraremos un material adaptado para los pueblos indígenas y originarios, como material de apoyo, y diseñaremos una estrategia para contribuir a la Fase Continental del Sínodo, en conexión con la estrategia general del CELAM. De esta manera, esperamos que ayude a que los aportes desde los pueblos indígenas y originarios lleguen de modo más explícito, y sean acogidos y valorizados para enriquecer la Iglesia con los valores sinodales presentes en nuestros pueblos.

Confiando que el Espíritu de Dios los acompaña en sus realidades y desafíos pastorales.

Huejutla, México 18 de mayo del 2022

Etiquetas:

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

homeless alliance
VinFlix
VFO logo

Archivo mensual

Categorías

FAMVIN

GRATIS
VER