Los miembros de la Sociedad de San Vicente de Paúl en la capital de Amazonas entregan alimentos a las puertas de los hospitales y en los hogares de las familias necesitadas.

El tiempo de pandemia nos han obligado a reinventar nuestra labor de ayuda. Aunque 2020 fue extremadamente difícil, el año posibilitó que más personas vieran la importancia de la movilización del voluntariado, la creación de redes y el compromiso de la población en la atención de diversas causas sociales.

Un ejemplo de ello es el trabajo de los vicentinos en Manaus (Amazonas). Los miembros de la SSVP de la ciudad crearon el «Proyecto Médicos de la Caridad», con el objetivo de asistir a los pacientes y familiares de pacientes con Covid-19, ofreciendo, además de consuelo, comida para los momentos difíciles en la espera.

Hubo tres días de acción para la distribución de bocadillos y bebidas, en los hospitales Spa Zona Sul, Spa Coroado, Hospital Joao Lucio y Hospital 28 de Agosto.

Además, unas 20 familias asistidas también recibieron alimentos en sus hogares.

El proyecto está coordinado por la Conferencia de Santa Cecilia, vinculada al Consejo Particular de Santa Rita de Casia, con el apoyo del Consejo Central de Manaus y la colaboración de las Unidades Vicentinas de Manaus.

«Poder ayudar, al menos un poco, nos hace muy felices. Para superar este período difícil e incierto, es importante que protejamos no sólo a los afectados por el virus, sino que ofrezcamos afecto y amor a nuestro prójimo, a todos. La enfermedad es grave, como también la situación de vulnerabilidad de la población necesitada. Esta atención es esencial», dijo la consocia Carla Andréa Duarte Pereira, de la Conferencia de Santa Cecilia, Manaus, AM.

Incluso con cifras tan optimistas, según una encuesta del IBGE de 2018, solo el 4,3% de la población brasileña realiza algún tipo de trabajo voluntario.

El gran objetivo para 2021 es ampliar esta ola de solidaridad y acción y cambiar la cultura del voluntariado en Brasil.

Fuente: http://ssvpbrasil.org.br/