Mickey Kelly reflexiona sobre la sanación, el amor y la misericordia de Dios en los tiempos oscuros, en las dificultades y la lucha. Habla de la oración como un ejercicio y como una fuerza que guía.

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Nota: los videos son en inglés, pero ofrecemos la traducción al español a continuación del video.

Transcripción:

Cuando das tu sí a Dios, Él hace maravillas. Crónicas 7,14 nos recuerda que necesitamos invocar el nombre de Dios para sanar nuestras tierras, y en este sentido, también necesitamos invocar a Dios para que nos sane, especialmente si hemos pasado por algún quebranto físico o incluso mental. Hay veces que durante algunos de mis momentos más oscuros, como fue mi periodo de desempleo, llegué al punto de ponerme de rodillas y decir: «Señor, te necesito ahora mismo. ¿Cómo puedo superar esto?». La oración es el ejercicio que necesitamos hacer todos los días, y creo que realmente tendemos a olvidar eso. Ya sea en algún momento de la mañana, y por supuesto, en algún momento de la noche, y también en algún momento intermedio. Es realmente esencial, pero también necesitamos abrir las escrituras y escuchar cómo Dios quiere comunicarse con nosotros. Y quiero saber lo que Dios tiene reservado para mí, y cuál es su voluntad para mí. En la oración, Dios nos da su sanación, su amor y su misericordia.