Tras el reciente asesinato de George Floyd y otros en los Estados Unidos, así como el racismo experimentado en otras partes del mundo, uno se puede preguntar: «¿Qué ha hecho la ONU para ayudar a erradicar el racismo?» A continuación se presentan algunos ejemplos de las medidas que ha tomado la ONU. Esta lista no es exhaustiva y sabemos que se puede hacer mucho más a nivel mundial. La intención es dar una idea de lo que la ONU ha hecho hasta ahora.

Emitió la Declaración Universal de Derechos Humanos en 1948. El artículo 1 de la Declaración establece que
«Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros». En el artículo 2, la Declaración establece: «Toda persona tiene todos los derechos y libertades proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política o de cualquier otra índole, origen nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra condición».

La UNESCO, en 1949, inició un programa mundial para combatir el racismo, que condujo a la Declaración sobre la Raza y los Prejuicios Raciales en 1978.  En la Declaración se pedían políticas para combatir el racismo y las desigualdades.

Ha hecho muchos llamamientos para poner fin al racismo. El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha hecho repetidos llamamientos para que se ponga fin a la incitación al odio, el racismo, la xenofobia y el genocidio, así como a los conflictos y a las diversas formas de violencia.  El 25 de marzo, Día Internacional de Recuerdo de las Víctimas de la Esclavitud y la Trata Transatlántica de Esclavos, el Sr. Guterres dijo: «El racismo sigue desempeñando un papel importante en nuestro mundo. El racismo es la razón por la que fuera de África, las personas de ascendencia africana suelen estar entre las últimas en la fila de la atención de la salud, la educación, la justicia y las oportunidades de todo tipo. Necesitamos levantar nuestras voces contra todas las expresiones de racismo y los casos de comportamiento racista. Necesitamos urgentemente desmantelar las estructuras racistas y reformar las instituciones racistas».

El Sr. Guterres reiteró su petición de que se pusiera fin al racismo tras la muerte del Sr. Floyd.

Hace más de 50 años, la ONU estableció un Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial.  El Comité es un órgano independiente de expertos que supervisa la forma en que los Estados miembros (países) aplican la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial de las Naciones Unidas, que fue adoptada en 1965 y entró en vigor en 1969.  Un ejemplo de la respuesta del Comité al racismo relacionado con un ataque con coche a manifestantes pacíficos en Charlottesville, Virginia, en agosto de 2017.  El Comité pidió que se investigara la raíz de esas acciones.  Además, pidió al Gobierno y a los dirigentes políticos de los Estados Unidos que rechazaran y condenaran «inequívoca e incondicionalmente» los discursos y los delitos de odio racista. El enlace al sitio web del Comité es el siguiente: https://www.ohchr.org/en/hrbodies/cerd/pages/cerdindex.aspx

Emitió la Declaración y el Programa de Acción de Durban el 22 de septiembre de 2001. Este documento, que ofrece una hoja de ruta para la acción en la lucha contra el racismo, fue adoptado por consenso en la Conferencia Mundial de las Naciones Unidas contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia, celebrada en 2001 en Durban (Sudáfrica).  Para revisar la declaración, vaya a este enlace: https://www.un.org/es/events/pastevents/cmcr/durban_sp.pdf

En 2011, en el décimo aniversario de la primera, se aprobó una declaración renovada. Se titula «Unidos contra el racismo, la discriminación racial, la xenofobia y las formas conexas de intolerancia».  Se puede encontrar en este enlace: https://www.un.org/es/letsfightracism/pdfs/united_against_racism_for_web.pdf

En la actualidad se celebra un decenio para las personas de ascendencia africana, de 2015 a 2024. En el siguiente enlace se ofrece una lista de los logros comunicados por los Estados Miembros, los órganos, mecanismos y organismos especializados de derechos humanos del sistema de las Naciones Unidas, las organizaciones regionales, las instituciones nacionales de derechos humanos y las organizaciones no gubernamentales, para mejorar los derechos de los afrodescendientes: https://www.un.org/es/observances/decade-people-african-descent

Pero hay que hacer mucho más, como lo demuestra el número de personas que sufren de racismo, violencia, intolerancia, discriminación y xenofobia en todo el mundo.

Hace dos años, se lanzó un plan para abordar el discurso del odio: en junio de 2019, las Naciones Unidas lanzaron un plan para identificar, prevenir y enfrentar los discursos de odio. En ese momento, el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, señaló los crecientes casos de racismo, xenofobia, misoginia, discriminación y violencia contra varios grupos étnicos y religiosos. Además, concienció sobre cómo las opiniones intolerantes y odiosas se amplían desgraciadamente a través de los medios de comunicación social.

En el plan se pide que se aborde la violencia, la marginación, la discriminación y la pobreza, así como el fortalecimiento de las instituciones estatales débiles.  El plan puede consultarse en este enlace: https://www.un.org/en/genocideprevention/documents/advising-and-mobilizing/Action_plan_on_hate_speech_ES.pdf

Adoptó los Objetivos de Desarrollo Sostenible en 2015. Dentro del Objetivo 10 (que pide el fin de las desigualdades) hay una meta que establece:  «Para 2030, potenciar y promover la inclusión social, económica y política de todos, independientemente de su edad, sexo, discapacidad, raza, etnia, origen, religión o condición económica o de otro tipo».  La meta 16B pide que se promuevan y apliquen «leyes y políticas no discriminatorias para el desarrollo sostenible».

A lo largo de los años, las Naciones Unidas han emitido llamamientos, declaraciones y resoluciones; han formado comités, desarrollado planes, proporcionado material educativo, entre otras acciones. La ONU ha ofrecido directrices. Los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil, a todos los niveles, deben hacer su parte en la implementación de las mismas si queremos terminar con la experiencia de un mundo libre de racismo.