¡Saludos, misionero laico vicenciano!

por | Oct 1, 2018 | Formación, Reflexiones | 0 Comentarios

Mi amiga Christy Tobin me escribió. Christy fue una misionera laica vicenciana que sirvió como uno de los primeros misioneros de EE. UU. en Bahir Dar (Etiopía). Tuve el privilegio de trabajar con Hna. Mary Beth Kubera, D.C. ya que este programa especial se inició a mediados de la primera década de este milenio.

Vincentian Lay Missionaries

Christy escribe:

11 años. No me lo podía creer. Saqué un álbum viejo de Etiopía: el año con Suz, Mark, Sarah, Jenn y Matt en Bahir Dar.

¿11 años? Busqué en Google la fecha de lanzamiento del último Harry Potter, para verificarlo (tengo vívidos recuerdos de haber leído Las Reliquias de la Muerte durante toda la noche, después de volver a casa, mientras me reajustaba a la nueva zona horaria).

Ya no soy una voluntaria joven e idealista, lista para una aventura de verano, enseñando en África. Tengo tres niños pequeños. Conduzco una minivan azul. Eso no es de jóvenes. (Con suerte, sigo siendo idealista). No hay esperanza a la vista de que aquellla mochila para senderismo que me llevé, ida y vuelta, a Bahir Dar durante tres veranos, se esté usando de nuevo pronto.

¡Mientras todos esos recuerdos regresaban al mirar el álbum, pensé en ti! En muchos de vosotros, con quienes viajé, enseñé y viví en comunidad, pero con los que no mantuve un gran contacto… has de saber que has estado en mis pensamientos estas últimas semanas, y me encantaría saber cómo te está tratando la vida, si tienes un minuto. Y, aunque no nos conociésemos, casi puedo garantizar que tennemos conocidos comunes en otro continente (o un amigo VLM común en alguna parte).

Dos preguntas han estado en mi mente, mientras leía las reflexiones de la VLM:

¿Qué puedo (todavía) recibir?
¿Cómo aún sigo bendecida por mis tres veranos en África? A veces parece que hace mucho tiempo, pero quiero desesperadamente que siga teniendo sentido en mi vida. ¿Cómo no puedo olvidar las lecciones de vida que me enseñaron acerca de la simplicidad, la alegría y el servicio? ¿Cómo puedo vivir la valentía, la tenacidad y la compasión de las personas que me inspiraron?

¿Qué puedo (todavía) dar?
Me di cuenta de que soy una donante caducada, no porque no pueda contribuir o no quiera dar: nunca encontré un momento para enviar un cheque o ingresar un número de tarjeta de crédito.

Deseo continuar compartiendo las historias de Etiopía: con amigos / familiares, con mis propios hijos, con los alumnos a los que enseño.

Y tampoco quiero dejar pasar tanto tiempo sin donar al trabajo de las Hijas de la Caridad en África.

¿Te unirás a mí en el Kenyan Summer Challenge? Los días de verano se están terminando, y este esfuerzo de recaudación de fondos está a mitad de camino. Incluso si no puedes dar, tal vez consideres compartir esta información y sus experiencias con alguien que pueda.

Espero saber de ti pronto, Con cariño, Christy



Para que la información del desafío se comparta con amigos, familiares y otros, use (en inglés):

Versión descriptiva de KSC: tiny.cc/kenyasummerchallenge
Para una versión corta e impactante de KSC: tinyurl.com/kenyasummerchallenge

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