Frente a las estadísticas que muestran que los niños que viven por debajo del umbral de escasos ingresos estaban más expuestos al abandono escolar, los jóvenes del Consejo SSVP regional de Quebec (Canadá) decidieron lanzar en 1985 una iniciativa que originalmente se llamaba “Servicio de Ayuda a los Jóvenes Estudiantes” (SAJE).  Objetivo: ayudar a las familias a hacer frente a las cargas financieras resultantes del curso escolar y permitir a los jóvenes que tuvieran una visión positiva de la escuela.

En 1993, la SSVP de la ciudad de Quebec lanzaba un punto de apoyo motorizado, que recorría las calles y algunos parques municipales, a fin de ofrecer ayuda, escucha, comidas y consejos a los jóvenes de entre 12 y 25 años.

Convertida en “Operación Buena Cara”, el programa se ha extendido a toda la provincia, lo que representa más de 300 Conferencias, haciéndose así el proyecto estrella del Consejo Regional.

Actualmente, la SSVP de Quebec interviene con alumnos de enseñanza primaria y secundaria cuyos padres tienen recursos económicos limitados. Pone en marcha acciones que permiten a los jóvenes participantes aumentar la confianza en sí mismos y plantearse el porvenir con optimismo. Además de contribuir a cubrir las necesidades básicas de los niños y adolescentes, La Operación Buena Cara incide directamente en los elementos clave del éxito escolar, tales como la autoestima, la pertenencia a un grupo y la valorización de superarse a sí mismo.

Luchar contra el abandono escolar tiene también como efecto el reducir el número de jóvenes que caen en las problemáticas ligadas a la delincuencia, el empleo precario, la itinerancia y la drogadicción.

El programa se compone de 3 aspectos:

• Apoyo en el inicio del curso escolar: El objetivo es responder a las necesidades esenciales de un niño. De julio a septiembre, las familias y los niños se preparan para el inicio del curso escolar. Es mucho lo que está en juego y la SSVP ayuda a los jóvenes a vivir una hermosa experiencia desde el principio del curso escolar facilitándoles el acceso a un material adaptado, ropa en buen estado y ayudando a las familias con el pago de las facturas de la escuela.
• Fomentar la continuidad: El objetivo de esta segunda fase es responder a la necesidad de pertenencia del niño ayudándole a desarrollar sus talentos en un proceso de aprendizaje personal y social. Se crean proyectos socioculturales comunitarios y artísticos con los niños en asociación con centros escolares, organismos locales, museos,  etc. Ello permite a los jóvenes participar activamente en una realización colectiva, favorecer la motivación, la autoestima y valorizar el potencial de cada uno.
• Recompensar el esfuerzo. El objetivo de esta tercera fase es responder a la necesidad de estima de un niño, valorizando sus esfuerzos y su contribución a la comunidad. Se entregan becas a alumnos que han demostrado un progreso o un mantenimiento en su aprendizaje escolar, su integración social, su implicación y su autonomía. Las becas se conceden al mérito más que al rendimiento académico. Se entregan cuantías de 250 $ a alumnos de enseñanza primaria y de 500 $ a alumnos de enseñanza secundaria, en una gala al final del curso. Este reconocimiento ante padres y profesores les anima a seguir haciendo los esfuerzos necesarios para continuar con sus estudios.

Creemos que el hecho de dar a todos las mismas oportunidades para descubrir todo su potencial favorece la continuidad de los niños en la escolarización y contribuye de manera tangible a romper el ciclo de la pobreza. (SSVP Montreal)

En 2016, 8.269 jóvenes de Quebec pudieron beneficiarse de la Operación Buena Cara y  engancharse al éxito.

Descubran las demás iniciativas y proyectos de la SSVP- Quebec en la web:

• Página web: http://ssvp-quebec.org/
• Página Facebook: https://www.facebook.com/Le-Rêve-dOzanam-172721069448332/

Fuente: http://ssvpglobal.org/