El encuentro, por internet, se realizó el viernes 6 de enero de 2017, aprovechando la reunión del Comité Ejecutivo de la Familia Vicenciana. Fue la primera oportunidad, de encontrarnos con uno de los líderes internacionales de la Familia Vicentina, para todos los presidentes nacionales famvin de la América Central; y el común denominador fue la apertura, disponibilidad y alto sentido de pertenencia.

A continuación el correo recibido de Alicia Duhne, agradeciendo la oportunidad compartida y la memoria recibida, con algunas modificaciones por razones de contexto y publicación.

Muchas gracias por el envío de esta reseña… Es admirable que Carlos haya tomado tantos apuntes y hecho tan bien la narrativa de la reunión.

Por mi parte solo deseo agradecerle a usted y al grupo, el que nos hayan invitado a Maru y a mí a esta encuentro.

Así mismo felicitarlos por esta iniciativa de reunirse a través de este medio. Es maravilloso como se han integrado a pesar de la distancia y las dificultades que a veces surgen para lograr tener una buena comunicación. ¡Mis felicitaciones!

Estoy segura que de esta manera tendrán muy buenos frutos… «La unión hace la fuerza», dice el refrán. Así que sueño con ustedes tener una Familia Vicentina muyunida, donde las diferencias generacionales sean vistas más como una fortaleza, que una dificultad, y que el amor entre nosotros y sobre todohacia Dios, reine en cada uno de nosotros.

Reciban un abrazo fraterno de su hermana enCristo y San Vicente,

Alicia

Respuesta del equipo de presidentes nacionales de FamVin:

Estimada Alicia y demás miembros de la Familia Vicentina en Centro América:

Espero se encuentren con ánimo en este inicio del 2017, que es un año especial para recordar como surgieron las iniciativas que llevaron a desencadenar tantas muestras de amor y misericordia a lo largo de 400 años, desde que San Vicente de Paúl, quiso responder de manera efectiva y afectiva a problemas concretos en su lugar y en su tiempo.

San Vicente vió en los problemas y en las crisis una oportunidad. Hoy en día el mundo sufre de grandes crisis y problemas, pero igual somos muchas personas que en el mundo conocemos de esa inspiración y nos invita a seguir a Jesús con ese espíritu de servicio y entrega. Sin embargo, no bastan las buenas intenciones y estoy seguro que cada miembro de la Familia Vicentina desea servir y compartir, pero hacerlo sin un plan, sin objetivos, sin una guía, puede ser desgastante y hasta frustrante.

Por eso la invitación a seguir uniendo lazos, uniendo voluntades, uniendo corazones, brazos, mentes, pies y manos, de manera conjunta a luchar por un servicio organizado para salir adelante como personas e hijos de Dios que somos.

El estarnos comunicando nos ayudará a compartir las buenas prácticas que hemos desarrollado en cada grupo, sede, ciudad o región. Vernos en hermandad y no como competencia, nos motivará a dar un buen testimonio de fraternidad cristiana y así las esperanzas se convertirán en frutos abundantes.

Muchas gracias Alicia por sus palabras y esperamos que podamos seguir uniendo lazos de colaboración entre las diversas ramas en los diversos países.

Bendiciones a todos y que la Virgen Poderosa siga iluminando nuestro caminar, nuestras luchas y esperanzas, sinceramente,

Correspondencia de la Presidenta Internacional A.I.C.

Muchas gracias por estos comunicados…

Especialmente debo felicitarlos por su estilo de liderazgo… Ustedes propician los cambios y el crecimiento. Dejan que los grupos crezcan y actúen por sí mismo, permaneciendo «desde atrás», dejando que ellos actúen por sí mismos. Veo que esto ha dado como resultado un buen desempeño en la América Centraly han logrado cubrir tantas iniciativas, que de otra manera sería imposible.

Agradezco mucho su ejemplo y pido a Dios, para quepodamos siempre serdóciles al espíritu de Cristo y San Vicente.

Reciban un abrazo fraterno con todo mi cariño y agradecimiento,

Alicia