En 1887, un pastor llamado Bertrand, descubre uno de sus bueyes de rodillas ante un matorral. ¡Resulta que allí encuentra una pequeña estatua de piedra! La Virgen no quiere ir a la iglesia parroquial, una peregrinación se organiza en el mismo sitio en que estaba la estatua. A lo largo de los siglos, ermitas se establecerán en el sitio y vivirán en una cueva debajo de la capilla.

El Santuario a Nuestra Señora de Prime-Combe fue confiado a los Misioneros Paúles en 1875. Establecieron una escuela apostólica y una casa de misiones. La escuela fue cerrada en 1905 después de las leyes Combes y volvieron a abrirla en 1921. Pero las Hijas de la Caridad habían establecido allí su noviciado durante la guerra de 1914-1918. Después ellas abrieron un orfanato para niños cuyos padres habían fallecido durante la guerra; lo que permitió la vocación del hermano Paul muy conocido en la región. Las peregrinaciones parroquiales iban viento en popa gracias a la presencia de la escuela apostólica. En 1937, cincuenta aniversario de la coronación de la imagen de Nuestra Señora del Buen Socorro, una muchedumbre inmensa de casi 50.000 peregrinos invadió los senderos de alrededor del santuario. Las peregrinaciones siguen hoy en día durante las fiestas marianas y las parroquias de los alrededores visitan el santuario durante el año.

Durante el terrible incendio de 1961 los edificios fueron preservados mientras que los alrededores forestales fueron totalmente destruidos.

Unos cohermanos que habían sido profesores en Prime-Combe aceptaron encargarse de las parroquias vecinas cuando cerró la escuela apostólica en 1964. Los edificios de la antigua escuela fueron alquilados al hospital psiquiátrico de Uzès hasta el año 2008. Enfermos a punto ( en vía ) de cura estaban alojados allí.

En 1987, los fieles de la Combe y de toda la diócesis de Nîmes celebraron el centenario del descubrimiento de la estatua milagrosa que se puede ver todavía hoy.

Durante el verano del 1997, una Comunidad benedictina que recibe candidatos a la vida monástica que sufren de alguna discapacidad se instala en el edificio donde se alojaban los cohermanos. La casa Madre está en Croixrault en la diócesis de Amiens.

El santuario invita a la tranquilidad, a la serenidad, al retiro en un ambiente de naturaleza maravillosa en medio de matorrales de la región del Gard. Lo que más llama la atención al llegar a aquel sitio, es el silencio, ni un ruido, sólo el de los pájaros, del viento que invita a la meditación y la contemplación.

Hoy, un cohermano va con regularidad para presidir las celebraciones. Un padre malgache de la diócesis que está en Francia por su salud es director del Priorato de los monjes Benedictinos. Un diácono permanente presta servicios al santuario. Un equipo de laicos dinámicos se encarga cotidianamente de acoger a los peregrinos y de ocuparse de los edificios. Los peregrinos estuvieron muy contentos de acoger al Superior General durante la fiesta de Epifanía este año. El cardenal Franc RODÉ nos dará la alegría de presidir las fiestas de Asunción en 2016.

Jean-Pierre RENOUARD, CM

Éric SAINT-SEVIN, CM

Fuente: http://cmglobal.org/