LA COMUNICACIÓN ES EL COMBUSTIBLE QUE MANTIENE ENCENDIDO EL FUEGO DE TU RELACIÓN; SIN ELLA, TU RELACIÓN SE ENFRÍA.

WILLIAM PAISLEY

¿Has visto alguna vez a un niño pequeño a la hora de comer? La forma en que comen, decoran su trona y a sí mismos y todo lo que está a su alcance con la comida que están engullendo mientras intentan captar la atención de cualquiera que se la dé.

Y luego cómo se retuercen y la frustración cuando terminan y quieren salir de la trona pero no tienen las palabras formadas para comunicarse. Todo lo que oímos es un galimatías infantil que intenta hacernos señales para que los saquemos.

Qué frustrante debe ser para los pequeños intentar hacernos entender sin poder comunicarse correctamente.

Aunque no seamos niños pequeños, hay muchos momentos en nuestra vida en los que nos sentimos frustrados, incapaces de expresar con palabras lo que pensamos y sentimos. En esta fase, a menudo recurrimos a tácticas de comunicación física. La intimidad, el tacto, los movimientos físicos y los aspectos creativos son algunos de ellos. Cada uno con el objetivo de comunicar algo de lo que somos, lo que pensamos o sentimos y lo que necesitamos.

La comunicación es clave en nuestra vida cotidiana. Ser capaz de comunicarse puede ser la diferencia entre un buen día o un mal día, un gran encuentro o un encuentro incómodo, una reunión productiva, etc.

Incluso cómo interactuamos con extraños. Por ejemplo, en lugar de responder bien a la pregunta «¿Cómo estás hoy?» de la cajera del supermercado, podríamos responder con algo más espontáneo o alegre.

San Mateo dice que «de la abundancia del corazón habla la boca». Las palabras son poderosas y, si se usan con creatividad, pueden aliviar nuestra frustración, ayudarnos a comunicarnos con eficacia e incluso tener la capacidad de alegrarle el día a alguien.

PREGUNTAS PARA REFLEXIONAR

• ¿Cómo utilizas las palabras para comunicarte eficazmente?
• ¿Practicas algún método para controlar tu frustración?
• Cuando participas en las buenas obras de la Sociedad de San Vicente de Paúl, ¿cómo te preparas para comunicarte eficazmente con las personas con quienes te encuentras?

De: Firewood for the soul, vol. 1, A Reflexion Book for the Whole Vincentian Family
Sociedad San Vicente de Paúl, Queensland, Australia.
Texto de: Samantha Hill.