El 14 de septiembre de 2023, las Hermanas y el personal de Nazaret se reunieron con representantes de LouCity & Racing Foundation, con sede en Louisville, y de Hamida Nadim Memorial Fund para examinar una posible colaboración futura con la misión de apoyar a los jóvenes y a las familias de Louisville.

LouCity & Racing Foundation es el brazo benéfico de los clubes de fútbol profesional masculino y femenino de Louisville. Recientemente, esta Fundación ha puesto en marcha un nuevo fondo de becas para apoyar a las familias de refugiados de la ciudad, ya que Louisville figura entre los primeros lugares en acogida de refugiados de otros países. El fondo de becas, denominado Hadima Nadim Memorial Fund, se creó en honor de la madre de Nadia Nadim, jugadora estrella del Racing de Louisville y ella misma refugiada.

Nadia, su madre y sus hermanas vivían en Afganistán cuando los talibanes ejecutaron a su padre, un general del Ejército Nacional Afgano. Enfrentadas a un entorno opresivo que restringía gravemente los derechos y libertades de las mujeres, Nadia y su familia emprendieron un angustioso viaje para escapar y buscar una vida mejor. A la tierna edad de 11 años, fueron sacados clandestinamente de su patria y finalmente se encontraron en un campo de refugiados en Dinamarca.

Fue en este campamento donde la joven Nadia se inició en el fútbol. El deporte le ofreció una salida terapéutica que no sólo reforzó su confianza, sino que también fomentó un sentimiento de comunidad y superó las barreras culturales.

«Sentí como si mi vida comenzara de nuevo», dijo Nadia al llegar al campamento. «Me enamoré del fútbol».

El amor de Nadia por este deporte culminó en una carrera profesional, representando a la selección nacional de Dinamarca a nivel internacional y jugando con el club de la Liga Nacional de Fútbol Femenino Racing Louisville FC. Hoy en día sigue jugando y acaba de terminar su doctorado en medicina.

El año pasado, la madre de Nadia murió trágicamente en un accidente de tráfico. Nadia se sintió impulsada a homenajear a la mujer valiente, fuerte y cariñosa que le había demostrado tanta resiliencia, fortaleza y orientación en su vida.

«Mi madre era una persona que se preocupaba por los que la rodeaban», dijo Nadia. «Siempre se aseguró de que fuéramos personas solidarias» y comprendía el impacto de la bondad.

El Fondo Conmemorativo, en su primer año, pudo ayudar a dos familias de refugiados, concediendo a cada una 5.000 dólares para ayudarles en su situación vital. Esas familias estaban a cargo de madres solteras, lo que parecía apropiado.

El Fondo Conmemorativo y la Fundación colaboraron en este empeño ofreciendo a esos niños oportunidades relacionadas con el fútbol. Estas oportunidades se extienden tanto a los jóvenes refugiados como a los no refugiados, e incluyen el acceso a campamentos, clínicas, posibles becas para jugar en la academia, programas educativos y mucho más.

«Nuestro objetivo es apoyar el fútbol juvenil y ofrecer oportunidades a todos los niños y niñas, independientemente de su capacidad económica», declaró Jeremy Jarvi, director ejecutivo de la Fundación LouCity & Racing. El fútbol es una plataforma para aprovechar los muchos beneficios que conlleva el deporte, como la enseñanza de la responsabilidad, la humildad y la comunicación».

Nadia afirmó que el fútbol y el deporte son un lenguaje universal. Sabe por experiencia propia la fraternidad que se puede encontrar entre un grupo de personas que practican este deporte, independientemente de las diferencias culturales y de procedencia.

«Vienes de un mundo diferente, no conoces el idioma, tienes un aspecto distinto y te sientes alienada, y luego entras en el campo de fútbol y formas parte de un equipo», afirmó.

El objetivo de la Fundación va más allá del deporte y busca fortalecer a los jóvenes y fomentar las relaciones positivas y la comunidad entre niños de distintos grupos demográficos.

«Parte de nuestra misión es ofrecer programas, ya sea en las escuelas, programas extraescolares, la asociación con Kentucky Refugee Ministries para proporcionar acceso a estos niños en sus barrios», dijo George Davis, IV, director del programa de la Fundación.

El jueves, cuando Nadia y el personal de la Fundación visitaron el Campus de la Casa Madre de Nazaret, se reunieron con Jackulin Jesu, SCN, presidenta de la Congregación, con las SCN Lisa Polega y Amina Bejos, que trabajan con jóvenes en Louisville, y con el personal de la Oficina de Avance de la Misión para compartir su misión de seguir ayudando a los jóvenes y a las familias de Louisville.

Sor Jacky dijo que las Hermanas ya trabajan con jóvenes y familias de Louisville a través de diversos medios, por lo que una colaboración con la Fundación Racing encajaría bien con la misión de las Hermanas.

Sor Lisa y sor Amina elogiaron a las organizaciones por su alcance y estuvieron de acuerdo en que una futura colaboración podría ser beneficiosa para los niños y adolescentes con los que trabajan. Sor Amina, profesora de la Academia de la Presentación de Louisville, dijo que la historia de Nadia era una fuente de inspiración que podía compartir con sus alumnas de secundaria.

«Enseño a chicas y me interesa mucho cómo puedo empoderar a mis chicas», dijo la hermana Amina.

La hermana Lisa, que trabaja con niños maltratados y abandonados en los tribunales de familia de Louisville, reconoció que las actividades y oportunidades deportivas pueden ofrecer una salida terapéutica a los niños traumatizados. Como alguien que experimentó su propio trauma infantil, Nadia dijo que el deporte era algo que podía controlar y que la ayudó a crecer y a superarlo.»Es dar a los niños una herramienta», dijo.

Tanto el grupo de Louisville como el de Nazaret acordaron seguir buscando formas de que sus respectivas organizaciones trabajen juntas para tener un impacto positivo y sostenible en los niños y las familias de la zona.

Fuente: https://nazareth.org/