De tantas cosas que podría resaltar, la primera es la fraternidad, la hermandad, la sinodalidad que se vivió durante todo el encuentro y que aún después del EMLA permanece, entre todos los que participamos.
Daba gusto estar juntos como JMV, pero también junto a las Hijas de la Caridad y Padres Paules que dijeron que sí a acompañarnos y lo hicieron con tanto amor, alegría, cercanía, humildad. Mil gracias por eso.
En cuanto a la semana de misión fue una semana de grandes experiencias de encuentro con Dios, en la comunidad que nos acogió. Fue hermoso poder estar con ellos tan de cerca, su apertura, su acogida. Amé poder enseñarles sobre la Biblia y a buscar en ella a los jóvenes; rezar el rosario todos como comunidad, sobre todo porque era la primera vez para muchos. Junto a mi compañera, Vicky de Nicaragua: oramos, jugamos, reímos, exploramos necesidades, buscamos animar en la fe, promover mayor unidad y hablar sobre la esencia y fuente de nuestra vida de fe: Jesús Eucaristía. Sigo orando y en comunicación con la comunidad para que pronto puedan tener la presencia Eucarística de Jesús en el Sagrario.
Muy muy agradecida con todo el Equipo Coordinador, con cada hermano que se dio la oportunidad, con todos los que hicieron posible el EMLA 2023. Junto a Jesús y María nuestra vida es misión.
Fabiola Torres Rivera
JMV Puerto Rico
Fuente: https://jmvinter.org/
0 comentarios