Hoy me pregunto: ¿hay algún camino que no tomé… o que tal vez no seguí lo suficiente?
Mantener a Jesús en la tumba
Uno de los caminos que toman algunos cristianos lleva, sin darse cuenta, a mantener a Jesús en las tumbas de sus corazones desanimados.
No abrazamos plenamente la esperanza y la alegría que vienen con la Resurrección.
Curiosamente, mantenemos a Jesús en la tumba cuando nos centramos demasiado en su sufrimiento y muerte. Parece que no somos conscientes del clímax de la «decimoquinta estación».
Nos aferramos a nuestros errores del pasado y nos negamos a aceptar el perdón y la misericordia de Cristo. Podemos quedarnos atrapados en un ciclo de culpa y vergüenza, pensando que debemos ganarnos la alegría de la resurrección.
Del mismo modo, también podemos mantener a Jesús en la tumba al no compartir la buena noticia de su Resurrección con los demás.
¡La «buena noticia» es contagiosa!
Debemos dejarnos perdonar y liberar por el amor de Cristo y abrazar la nueva vida y esperanza que viene con la Resurrección.
Las 14 «Estaciones de la Luz» (el Via Lucis)
Los papas Juan Pablo II y Benedicto XVI nos invitan a recorrer el camino que algunos llaman la «decimoquinta estación».
Las «Estaciones de la Luz» (el Via Lucis) son una continuación del camino hacia la cruz. Se trata de caminar con los seguidores de Cristo a través de unas 14 estaciones o etapas en el camino de los primeros cristianos después de la Resurrección de Jesús.
Debemos seguir caminando con los seguidores de Cristo en su camino de reconocer y aceptar poco a poco el poder transformador de Jesús resucitado en sus vidas. Estos pllaman nuestra atención sobre las experiencias de este viaje registradas en los Hechos de los Apóstoles.
- Jesús resucita de entre los muertos.
- María Magdalena y las demás mujeres encuentran el sepulcro vacío.
- Se aparece a María, que lo reconoce cuando la llama por su nombre.
- Jesús se aparece a dos discípulos en el camino de Emaús.
- Estos discípulos reconocen por fin a Jesús cuando parte el pan con ellos.
- Jesús muestra sus heridas a los discípulos perplejos reunidos en Jerusalén.
- Da a sus discípulos el don de administrar el perdón.
- Jesús se aparece al dubitativo Tomás.
- Alimenta a sus discípulos con una pesca milagrosa.
- Jesús envía a sus seguidores a difundir la noticia de la resurrección.
- Los discípulos son testigos de su ascensión al cielo.
- Jesús les da su Espíritu en Pentecostés.
- María es asunta al cielo.
- María es coronada Reina del Cielo y de la Tierra.
Hoy somos nosotros quienes recorremos su camino
Las 14 estaciones del Via Lucis son una invitación a reconocer nuestras experiencias de Jesús resucitado en nuestra vida cotidiana.
Experimentamos momentos transformadores cuando reconocemos a Jesús en…
- Las cosas buenas de nuestra vida que presagian la gran alegría que está por llegar.
- Nuestra necesidad de apresurarnos a contárselo a otros.
- Momentos en los que alguien nos llama por nuestro nombre.
- Aquellos que nos ayudan a atar cabos en nuestro camino.
- Momentos en los que compartimos el pan.
- Momentos en los que una comunidad se une en la incertidumbre.
- Momentos en los que ponemos nuestras manos en las heridas de Jesús hoy.
- Momentos en los que otro nos perdona, o podemos perdonarle.
- Momentos en los que inesperadamente somos alimentados.
- Momentos en los que aceptamos su llamada a compartir la Buena Noticia.
- En aquellos que nos han precedido en el camino.
- En los momentos en que el espíritu de Dios viene sobre nosotros.
- En María que nos precede a todos.
- Y que nos llama a estar con ella y con su Hijo.
En este tiempo de Pascua caminemos hacia la decimoquinta estación de nuestro viaje para reconocer a Cristo resucitado en nuestras vidas.
Publicado originalmente en Vincentian Mindwalk
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