Más de 40 misioneros de la Familia Vicenciana participaron en la misión en Piracema (Minas Gerais, Brasil).

Dom Helder Câmara escribió: «Misión es partir, caminar, dejar todo, salir de sí, quebrar la corteza del egoísmo que nos encierra en nuestro yo». Con el deseo de encontrarse con los hermanos allí donde residen, 43 misioneros de diferentes ramas de la Familia Vicenciana (Congregación de la Misión, Hijas de la Caridad, Misioneros Seglares Vicencianos, Sociedad de San Vicente de Paúl, Hermanas de Gysegem y Hermanos de Misericordia), llevaron a cabo en la Parroquia de Nossa Senhora das Necessidades, en Piracema (Minas Gerais, Brasil), las Santas Misiones Populares Vicencianas (SMPV), del 14 al 22 de enero de 2023.

Debido a las lluvias, el párroco, Romualdo Leite, y el equipo coordinador de las Santas Misiones Populares Vicencianas decidieron que la duración y el número de participantes serían más reducidos que en años anteriores. La situación, sin embargo, no disminuyó la calidad del trabajo, la intensidad de las celebraciones y la vida que este tiempo de gracia suele aportar al pueblo de Dios.

La parroquia ya había sido atendida por las misiones vicencianas en el año 2022, en diferentes momentos: Semana Santa, Semana Vocacional Misionera y diversos momentos de formación que prepararon a los fieles para este tiempo misionero que tuvo lugar este mes de enero. Las actividades de esta última semana tuvieron lugar en las diferentes comunidades de la parroquia: Aguada, B. Preto, B. Retiro, Cidade Nova, Colônia, J. Rodrigues, Laje, M. Verde, Matriz, Mosquito, Mundeus, P. de Baixo, P. de Cima, Paciência Pintos, Quilombo, Rosário, S. Expedito, Santo Antônio, São Judas, Sobrado, Sossego, Souza, Taquaral, Tatu y Valongo.

Las misiones consistieron esencialmente en visitas domiciliarias, dirigidas a todos los residentes de la Parroquia, con la escucha, la oración y la bendición de las casas atendidas por los misioneros laicos y/o consagrados. Los sacerdotes presentes (padres Cleber, Denilson, Ezequiel, Juarez y Onésio) administraron los sacramentos de la Reconciliación y de la Unción a ancianos y enfermos; también hubo espacios de formación para los equipos pastorales, de mano de los Diáconos Tulio y Adriano Pires, entre otros; además, hubo actividades dirigidas a la pastoral vocacional.

Fue un tiempo de gracia del Señor junto al pueblo de Piracema, que acogió a los misioneros con afecto y dio lo mejor que tenía o podía hacer para que la misión fuese conforme a la voluntad de Dios. Nuestro sincero agradecimiento al padre Romualdo y a todo el pueblo de Dios que vive allí, que no escatimó esfuerzos para que la misión se realizara. Que Dios los bendiga y que Nuestra Señora de las Necesidades los proteja. Sigamos unidos a Jesús, María y los santos vicentinos en el desarrollo de las misiones, que este año serán dirigidas a la Parroquia-Misión de São José Operário, en Serra do Ramalho (Bahia, Brasil). Contamos con el apoyo y las oraciones de todos.

San Vicente de Paúl, ¡ruega por nosotros!

P. Cléber Teodósio, CM.
Fuente: https://www.pbcm.org.br/