¿Ha escuchado alguna declaración realmente «impactante» en las últimas 24 horas?

Las portadas de los periódicos sensacionalistas muestran declaraciones impactantes. Los expertos en noticias y los «influencers» de Internet se especializan en «titulares clickbait» impactantes.

¿Te ha impactado el bombardeo de hospitales de maternidad y que la policía parezca esperar órdenes de alguien superior mientras se dispara a los niños en las aulas?

Ahora, la «pregunta trampa».

¿Cuál es la afirmación más radical o chocante que escuchas… pero que quizás no consideras chocante?

En este momento te invito a considerar dos palabras que usamos comúnmente en la oración. Jesús pidió a sus seguidores que rezaran Padre NUESTRO. Me estoy dando cuenta de que Padre Nuestro no es sólo una fórmula memorizada o un título ritual. Creer… y vivir en consecuencia… estas palabras son un reto verdaderamente radical para todos y cada uno de nosotros.

Nos perdemos su radicalidad porque nos centramos en la primera palabra… «Padre» y pasamos por alto las implicaciones del «NUESTRO». Inconscientemente pensamos en «MI» padre.

¿Es el «Padre NUESTRO» una oración desafiante?

Lo fue para los primeros seguidores de Jesús. Se les escapaba el significado de rezar «Padre NUESTRO» como Jesús les enseñó a rezar.

Sólo hay que preguntar a los sorprendidos oyentes de la parábola del Buen Samaritano.

El buen samaritano es una historia sobre el cuidado de alguien que es tu enemigo jurado. Desvela el significado radical de NOSOTROS. Somos el guardián de nuestro hermano, independientemente de su linaje o sus creencias.

¡Hemos domesticado la historia del buen samaritano!

Entendiendo lo odiado que era un samaritano, vemos que Jesús desafía a sus oyentes a ser prójimos que se preocupan y acuden en ayuda de los demás aunque no sean amigos o incluso personas «buenas».

¿No tendemos a pensar en nuestros hermanos y hermanas como algo más que simples vecinos?

En esta impactante parábola, Jesús nos desafía a aceptar a cada uno como nuestros hermanos y hermanas, especialmente cuando están en necesidad.

Sugiero leer el perspicaz comentario del Papa Francisco (párrafos 56-86). No es para los débiles de corazón.

Implicaciones radicales

Jesús nos pide que nos hagamos presentes ante cada persona que necesite ayuda, independientemente de que pertenezca a nuestro grupo social o a nuestro linaje. Esto es una conmoción, ya sea que nos llamemos religiosos o no, republicanos o demócratas, cristianos, no cristianos o nada de lo anterior» ¡Es un shock!

Jesús concluye la parábola diciendo: «Ve y haz lo mismo»… sé prójimo del otro (Lc 10,37). Estas palabras se hacen eco de su mandato en la última cena… «Haced esto en memoria mía»… Lavaros los pies unos a otros.

Por supuesto, en el fondo subyace la constatación de que Dios da el ejemplo en la persona de Jesús. Su ejemplo nos desafía a todos los que tenemos tan poca entendimiento de este desafío radical a la forma en que pensamos en muchos grados de las relaciones o ser vecinos.

Basta pensar en su incredulidad después de la crucifixión de Jesús. Todavía nos cuesta entender que Jesús muriera por todos, ¡incluyendo a todos sus hermanos y hermanas que causaron o animaron su sufrimiento!

El viaje de «mi» a «nuestro» Padre

En los restantes capítulos de su encíclica, el papa Francisco desentraña las implicaciones sociales de la historia de aquellos que se encuentran en el camino de quienes valoramos como prójimos, y mucho menos como hermanas y hermanos.

Fratelli tutti no consiste en hacer ajustes aquí y allá en nuestra vida personal y comunitaria. Se trata más bien de una forma de releer y vivir el Evangelio para nuestro tiempo.

Al contar la historia del buen samaritano, Jesús se describía a sí mismo y a su misión de llevar la sanación no sólo al mundo polarizado de su época, sino al nuestro.

¿No es esta «Buena Noticia» más impactante que cualquiera de nuestros impactantes titulares?

Preguntas personales

• ¿Hasta qué punto soy sensible a mis hermanos y hermanas cuando rezo al Padre Nuestro como pidió Jesús?
  
• ¿Cuáles son los retos a los que me enfrento al vivir esta impactante forma de pensar?

Publicado originalmente en Vincentian Mindwalk