Desalojos: La pesadilla de un inquilino
Cynthia Griffith me ha instruido sobre la arma de doble filo del creciente número de desalojos. Los siguientes extractos, de un post en el sitio web «Invisible People» [Gente Invisible], presentan algunos hechos contundentes.
A pesar de saber que, en Estados Unidos, no están permitidos los desalojos por pagos insatisfechos o atrasados, algunos propietarios se han dedicado a acosar a los inquilinos para que les den dinero que no tienen.
Algunas de las tácticas de acoso más comunes son:
- Desconectar la electricidad
- Apagar la calefacción y/o el agua caliente
- Cambiar las cerraduras
- Mostrar la propiedad a potenciales nuevos inquilinos o compradores
- Enviar múltiples mensajes de texto de acoso
- Llamar repetidamente para solicitar los pagos
- Hacer falsas «reparaciones» que inutilizan aparatos esenciales (como refrigeradores, congeladores, etc.)
Otros propietarios han tomado una ruta diferente, pero igualmente perjudicial, haciendo circular información falsa. Si su casero le ha dicho que una vez que se levanten las moratorias, se le exigirá que pague todo lo que debe en un solo pago, o si le han dicho que no tiene derecho a la congelación de los alquileres nacionales, sepa que ambas declaraciones son mentiras.
Obstáculos que enfrentan los inquilinos
Debido al desastre internacional, muchos inquilinos se enfrentan a problemas que nunca podrían haber previsto. Algunas de las preocupaciones más comunes son las siguientes:
- Los inquilinos no saben/entienden/tienen acceso a las nuevas leyes diseñadas para protegerlos
- Los inquilinos no saben a quién llamar si un propietario viola sus derechos
- Muchas agencias experimentan un horario limitado, lo que causa retrasos a los arrendatarios que buscan conocimiento o representación legal
- Un aire de incertidumbre al terminar las moratorias, mientras decenas de millones de estadounidenses siguen desempleados
Para pensar: Los propietarios también tienen facturas que pagar
Este post muestra el lado feo de los propietarios abusando del poder. Es importante recordar, sin embargo, que no todos los propietarios están desconectando la corriente, cortando el suministro de agua, y dejando a los inquilinos fuera de sus residencias. La mayoría están demasiado ocupados tratando de pagar sus propias facturas, para no terminar varados sin un lugar donde vivir.
“El alquiler que cobro apenas cubre los gastos mensuales de esta propiedad. Honestamente, yo también tengo dificultades financieras, como tú y millones de personas… especialmente siendo un trabajador autónomo como agente inmobiliario (y el mercado inmobiliario se vio afectado en gran medida debido a esta pandemia de COVID-19)».
Con las moratorias levantándose lentamente, es difícil predecir lo que pasará después. Una cosa es cierta: la vivienda es atención sanitaria, y debemos encontrar una manera de hacerla disponible universalmente. Contacte con sus representantes locales y nacionales para extender las moratorias y aliviar la carga financiera de los propietarios también.
¡Gracias, Cynthia! Cynthia Griffith es una escritora independiente dedicada a la justicia social y a los temas ambientales. ¡Merece la pena leer el artículo completo! (en inglés).
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