En marzo de este año, Ihor se acercó a los servicios comunitarios de Depaul Ucrania en Odesa y nos pidió ayuda.
Ihor tiene 61 años, casado y con una hija, pero por culpa de un desacuerdo con sus familiares perdieron su casa hace cinco años. Desde entonces, la familia ha vivido en apartamentos alquilados de forma temporal en Léopolis mientras el trabajaba de encargado en un almacén. Sin embargo, justo antes de que entrara en vigor la cuarentena, el dueño lo despidió. Por recomendación de un amigo, Ilhor y su familia se mudaron a Odesa en busca de una vida mejor.
Al llegar allí, tomaron efecto las medidas de confinamiento y empeoró la situación del mercado laboral. Ihor y su mujer no podía encontrar trabajo pero tampoco volver a Leópolis al haber parado todo el transporte en la región. Ilhor no tenía ni trabajo, ni vivienda ni forma de subsistir. Dejó a su mujer y su hija en el apartamento de su amigo pero no había sitio para él, así que pasó dos noches durmiendo en el portal de la casa.
Al reconocer la urgente situación de Ilhor, le ofrecimos una plaza en nuestro refugio. En apenas unos días, conseguimos ayudar a Ilhor a encontrar un trabajo a través de uno de nuestros colaboradores. En poco tiempo, la situación de Ihor a cambiado por completo. Ahora, no solo puede comprar comida para él, sino también para su mujer y su hija, que todavía no han encontrado empleo ni tienen otro medio de subsistencia. Ihor quiere ahorar dinero para alquilar un pequeño apartamento para su familia y volver a estar todos juntos otra vez. Seguiremos apoyando y ayudando a Ihor y a su familia en estos difíciles momentos y hasta que superen sus dificultades.
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