El 23 de diciembre, una erupción y un deslizamiento de tierra bajo el mar causaron un nuevo tsunami en Indonesia, esta vez en el estrecho de Sanda que conecta la isla de Java y la de Sumatra. Muchas personas murieron, están heridas o siguen desaparecidas. Muchas personas se quedaron sin hogar. Como Familia Vicenciana, oramos por estas personas de Indonesia.

El Papa Francisco invitó a todos a unirse a él en oración por las víctimas y sus seres queridos. “Estoy espiritualmente cercano a los desplazados y a todas las personas sometidas a prueba. Imploro a Dios alivio en el sufrimiento. Hago un llamado para que no falte a estos hermanos y hermanas nuestra solidaridad», dijo.

Adaptado de https://www.cmmbrothers.org/

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