Desde hace 15 años, la parroquia San José de Puerto Lempira (Misión de Honduras) ha estado retransmitiendo, a través de las ondas de la Radio católica Kupia Kumi, a todas las comunidades del Departamento de Gracias a Dios, más conocido como La Moskitia hondureña (16,997 km² de extensión y una población estimada de 100.000 habitantes).

Durante todo este tiempo de transmisión, ha sido un excelente medio de evangelización, de comunicación social, de noticias… Pero, sobre todo, ha sido un medio de comunión entre comunidades tan alejadas y tan aisladas, donde no llegaba otro medio de comunicación. Incluso hoy en día, sigue habiendo muchas comunidades a las que no llega la señal de telefonía móvil y el único medio de comunicación e información sigue siendo el nuestro.

Gracias al esfuerzo de mucha gente, durante todos estos años nuestra Radio es la que se ha mantenido fiel a todos los radioyentes, emitiendo a pesar de las dificultades: problemas con la energía, tormentas eléctricas que han dañado la antena, el equipo…

Desde hace años, dada la inestabilidad de la energía en esta zona, se ha estado luchando por conseguir un sistema solar que pudiera levantar la radio y la acercara a ser más autosostenible y ecológica. Se hizo un intento hace unos años, pero no funcionó. Esto no mermó las esperanzas de que un día pudiéramos emitir con energía solar, cuidando así nuestra Casa Común, al utilizar así una energía renovable, siguiendo las líneas de la Encíclica “Laudato si”, del Papa Francisco, que la Iglesia Católica de Honduras ha tomado como objetivo pastoral para este año 2018.

Hace cuatro años, conseguíamos de manos del PNUD la donación de las placas solares necesarias para hacer realidad lo que hasta ahora era sólo una esperanza. En 2016, a través de la Fundación Ad Gentes del Arzobispado de Valencia, conseguíamos las baterías de gel para que este sueño estuviera más cerca de cumplirse. Y, finalmente, este año, a través de diferentes donantes particulares de España, conseguimos todo el equipamiento necesario: reguladores, inversor, cableado, centro de carga… Por tanto, ha sido un camino lento, pero seguro, en palabras de acá, «tawa tawa».

Ya sólo quedaba juntar todas las piezas, ponerlo todo en manos de Dios y… El resultado es que, desde el pasado lunes 8 de octubre de este año 2018, estamos emitiendo completamente con energía solar, de forma que la emisión es ininterrumpida desde la mañana hasta la noche.

Así que sólo podemos dar gracias a Dios y agradecer a todos los que han hecho posible que este sueño se haga realidad, y junto con ellos proclamar: Laudato si.

Isaac Demets, C.M.

Fuente: http://misionerospaules.org/