Hace casi 30 años, 171 Jefes de Estado se reunieron en Copenhague en la Cumbre Mundial de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Social. En 1995 tuvo lugar la mayor reunión de líderes mundiales jamás congregada, a la que asistieron más de 14.000 personas, incluidos delegados de 186 países, con 117 representados a nivel de Jefes de Estado o de Gobierno. En la Cumbre, los gobiernos se comprometieron a hacer de la erradicación de la pobreza, la meta del pleno empleo y el fomento de la integración social objetivos primordiales del desarrollo. Al término de la Cumbre, los gobiernos adoptaron una Declaración y un Programa de Acción que representaban un nuevo consenso sobre la necesidad de situar a las personas en el centro del desarrollo, con el fin de impulsar el desarrollo social a través de 10 compromisos. La Declaración de Copenhague sobre Desarrollo Social y su Programa de Acción han guiado desde entonces la acción multilateral en materia de desarrollo social.
Tras esta iniciativa, la ONU se centró en la erradicación de la pobreza en los Objetivos de Desarrollo del Milenio y, más recientemente, en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Sin embargo, a medida que nos acercamos al 30 aniversario de la Declaración y Plataforma de Acción de Copenhague y pasamos el ecuador de los ODS o Agenda 2030, el objetivo de erradicar la pobreza sigue siendo difícil de alcanzar. De hecho, la pobreza y la desigualdad están aumentando y los más pobres y vulnerables del mundo están sufriendo los peores efectos de los desafíos globales (cfr. Informe sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2023 https://unstats.un.org/sdgs/report/2023/)
Esto no es desconocido para los vicentinos que trabajan incansablemente con las personas en situación de pobreza para crear salidas a la pobreza y eliminar las causas sistémicas de la pobreza, una de las cuales es la falta de vivienda. Este año se celebra una nueva iniciativa en las Naciones Unidas. El 26 de febrero de 2024 la Asamblea General aprobó el documento A/78/261, para crear una Segunda Cumbre Social Mundial. En el mismo periodo de sesiones, la Asamblea General aprobó una segunda Resolución sobre las personas sin hogar A/78/236, Políticas y programas inclusivos para abordar el problema de las personas sin hogar, en la que se pide al Secretario General que presente en 2026 un segundo informe sobre las personas sin hogar en el que se actualicen los progresos realizados en esta cuestión. En el informe del Secretario General 78/211 en preparación para esta sesión de la Asamblea General, señaló la necesidad de una acción audaz y transformadora para reactivar el progreso y alcanzar tanto los objetivos de Copenhague como los ODS.
El impulso para abordar la pobreza es palpable en la ONU. Para aprovechar este impulso y abordar el problema de las personas sin hogar, el Grupo de Trabajo para Acabar con el Sinhogarismo se reunió con la Vicesecretaria General, Amina J. Mohammed, para estudiar maneras de incorporar el problema de las personas sin hogar a esta agenda. En una reunión muy productiva celebrada el 15 de marzo, a la que asistieron los miembros del Comité Ejecutivo Jim Claffey, Tiffany Connolly, Mary Ann Dantuono, Jean Quinn, Jackie Shapiro, y organizada por el Dr. Ify Ofong (Lydia Stazen se encontraba en Mongolia y participó en la preparación, pero no pudo asistir a la reunión en persona), desarrollamos una estrategia para vincular estrechamente la problemática de las personas sin hogar y la agenda de la pobreza. Esta estrategia incluirá la creación de un «grupo de amigos» (Estados miembros que defenderán esta agenda), la defensa de un día oficial de las Naciones Unidas para la conmemoración de la problemática mundial de las personas sin hogar, el fomento de la recopilación de datos desglosados sobre las personas sin hogar por parte de los Estados miembros a nivel nacional, regional e internacional, la creación de un grupo de trabajo interinstitucional de las Naciones Unidas sobre las personas sin hogar y, por último, la inclusión de las personas sin hogar y la sociedad civil tanto en la Cumbre del Futuro de 2024 como en la II Cumbre Social Mundial de 2025.
Esta oportunidad requerirá una mayor actividad y compromiso de muchas maneras por parte del Grupo de Trabajo para Acabar con el Sinhogarismo y de la Familia Vicenciana. Nuestro compromiso es alto y creemos que la Cumbre Social Mundial de 2025 reforzará el apoyo a los compromisos asumidos en Copenhague, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU y nuestros esfuerzos para acabar con el sinhogarismo, al tiempo que movilizará la acción colectiva sobre los problemas sociales más urgentes del mundo. Únase a nosotros con sus oraciones e historias de sus buenas obras.
MaryAnn Dantuono,
representante de AIC ante la ONU
0 comentarios