¡Imagina un mundo libre del trabajo infantil! El número de niños en todo el mundo atrapados en el trabajo infantil es asombroso: 168 millones. No obstante, estos números no reflejan la realidad; los que trabajan en los sectores informales —el trabajo doméstico, la agricultura o la minería ilegal— no se cuentan. Viven en las sombras. Si no hay datos fiables sobre el trabajo infantil en un país, no habrá asignación de recursos para liberarlos de esta esclavitud, proporcionarles educación y una vida digna. Su infancia les ha sido robada. El trabajo infantil viola los derechos humanos.

No todo el trabajo realizado por niños puede clasificarse como trabajo infantil. Según la Organización Internacional del Trabajo, el término «trabajo infantil» se define a menudo como «el trabajo que priva a los niños de su infancia, su potencial y su dignidad y que es perjudicial para su desarrollo físico y mental». A menudo, el trabajo infantil  conlleva que los niños sean esclavizados, separados de sus familias, expuestos a graves peligros y enfermedades y/o dejados a su suerte en las calles de las grandes ciudades, a una edad muy temprana.

La mayoría de los países del mundo tienen leyes de trabajo infantil que establecen los 14 ó 15 años como la edad mínima para trabajar, y prohíben a niños menores de 18 años que trabajen en condiciones peligrosas. Las formas extremas de trabajo infantil pueden incluir niños esclavizados, venta y trata de niños y servidumbre por deudas y trabajo obligatorio, lo que puede llevar a que los niños sean separados de sus familias y dejados a su suerte en las calles.

¿Dónde encontramos trabajo infantil?

85 millones de niños están realizando trabajos peligrosos.

Tal como se define en el artículo 3 del Convenio núm. 182 de la OIT, las peores formas de trabajo infantil son:

• Todas las formas de esclavitud o prácticas análogas a la esclavitud, como la venta y trata de niños, la servidumbre por deudas y la servidumbre y el trabajo forzoso u obligatorio, incluido el reclutamiento forzoso u obligatorio de niños para su uso en conflictos armados;
• El uso, el reclutamiento u oferta de un niño para la prostitución, para la producción de pornografía o actuaciones pornográficas;
• El uso, el reclutamiento o la oferta de un niño para actividades ilícitas, en particular para la producción y el tráfico de drogas …;
• Los trabajos que, por su naturaleza o las circunstancias en que se lleva a cabo, puedan dañar la salud, la seguridad o la moral de los niños.

Muchos factores contribuyen al trabajo infantil, como la pobreza, la falta de acceso a la educación y la formación profesional, el analfabetismo de los padres, la falta de conciencia de los efectos negativos del trabajo infantil, la situación social y económica de la familia, el endeudamiento familiar, los altos niveles de desempleo adulto y los valores culturales de la familia y la comunidad. Los conflictos, las guerras y los desastres en curso están llevando a más niños a situaciones de vulnerabilidad, objetivos fáciles de explotar. Los niños son empleados valiosos, ya que son baratos, desconocen sus derechos y es poco probable que rechacen las demandas de su empleador.

¿Qué podemos hacer para abordar el trabajo infantil? No existe una estrategia única que elimine el trabajo infantil; la más importante es la aplicación de las leyes laborales contra el trabajo infantil, la reducción de la pobreza y la desigualdad, el suministro de educación accesible y asequible, la formación profesional y el empleo decente. Esto los protegerá de la explotación.

Unámonos a la iniciativa Alianza 8.7 de la Organización Internacional del Trabajo para implementar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 8.7 por un mundo libre de trabajo forzado, esclavitud moderna, trata de personas y trabajo infantil en todas sus formas, con especial atención a sus peores formas.

Ved este video: El ABC del Trabajo Infantil … .15 productos afectados por el trabajo infantil y la esclavitud infantil (en inglés). ¿Cuántos usas?

Teresa Kotturan, SCN, representante de ONGs para la Federación de Hermanas de la Caridad